Seguinos en redes

Estados Unidos

El izquierdista juez Breyer se retira de la Corte Suprema y Biden deberá reemplazarlo: Suena Kamala Harris

Publicado

en

Joe Biden confirmó que nominará a "una mujer afroamericana" y entre los posibles nominados muchos medios incluyen el nombre de la vicepresidente.

El juez de izquierda Stephen Breyer se retirará a fin de año y dejará vacante su lugar en la Corte Suprema a sus 83 años de edad. Había sido nominado al máximo tribunal en 1994 por el entonces presidente demócrata Bill Clinton.

La noticia tomó por sorpresa a la Casa Blanca. Según reveló la CNN, el equipo de Biden le había pedido que se jubilara antes de las elecciones de medio término, donde los demócratas podrían perder la escueta mayoría que mantienen en el Senado, pero Breyer se había negado.

Sin embargo, esta semana cambió de parecer y Biden ahora tiene que encontrar un reemplazo, lograr que su aprobación sea introducida en el calendario legislativo antes de noviembre y que 51 de los 100 senadores vote a favor de su candidato. Actualmente los demócratas tienen 50 senadores, por lo que deberá consensuar por lo menos con un republicano.

En una conferencia de prensa que se armó a las apuradas después de que trascendiera la noticia, Biden confirmó este jueves que en su lista de reemplazos "solo tiene mujeres afroamericanas" y que la nominada, de ser aprobada, será la primera mujer negra en el tribunal superior.

"Nuestro proceso va a ser riguroso. Seleccionaré a un candidato digno del legado de excelencia y decencia del juez Breyer. Mientras estudié los antecedentes y los escritos de los candidatos, no tomé ninguna decisión excepto una: la persona que nominaré será alguien con calificaciones, carácter, experiencia e integridad extraordinarios. Y esa persona será la primera mujer negra nominada a la Corte Suprema de los Estados Unidos”, dijo Biden.

Una breve lista de posibles nominados había estado circulando en Washington mucho antes de que se hicieran públicos los planes de jubilación de Breyer, y los funcionarios de la Oficina del Abogado de la Casa Blanca ya empezaron a conversar con los principales nombres. Biden confirmó que dará a conocer la decisión a fines de febrero.

Los principales nombres:

Ketanji Brown Jackson

En sus primeros días en la Casa Blanca, Biden elevó a la jueza de izquierdista Ketanji Brown Jackson, nombrándola el año pasado a la Corte de Apelaciones de EE.UU. para el Distrito de Columbia, que se considera la segunda corte federal más poderosa del país.

Ketanji, de 51 años, trabajó para Breyer y tiene su título en la Facultad de Derecho de Harvard, el mayor semillero de jueces de la Corte Suprema en la historia del país.

Es una jueza ultra-militante y todos sus fallos han estado cargados de un enorme contenido político. Ha defendido las violentas protestas de Black Lives Matter, y como jueza federal ordenó al exabogado de la Casa Blanca de Trump, Don McGahn, que cumpliera con la citación del Congreso para testificar sobre las protestas del 6 de enero, aunque no había ninguna ley que se lo exigiera.

Como jueza de apelaciones, firmó la polémica opinión que ordenaba la divulgación de los documentos de la Casa Blanca de Trump para que el Comité Investigador del 6 de enero pueda disponer de esta información como evidencia, algo que juristas y expertos aseguran que viola el debido proceso de la justicia, y que es algo que solo debería hacerse en un tribunal, no en un comité legislativo.

Ketanji Brown Jackson, nominada para ser jueza de circuito de EE. UU. para el circuito del Distrito de Columbia, testifica durante su audiencia de confirmación del Comité Judicial del Senado.

Leondra Kruger

Kruger, ahora de 45 años y la candidata más joven de la lista, ya fue la persona más joven en ser nombrada para la Corte Suprema de California en 2014, cargo que ocupa actualmente.

La jueza también mantiene un perfil altamente político, defendiendo Black Lives Matter y a Antifa, pero a diferencia de Ketanji, está íntimamente familiarizada con la Corte Suprema, ya que trabajó como secretaria del difunto juez izquierdista John Paul Stevens y se desempeñó como procuradora general adjunta interina en la administración de Obama.

Kruger representa un sector del Partido Demócrata más joven y radicalizado. Mientras Ketanji podría considerarse la candidata del obamismo (hoy, bidenismo), la jueza de California se encuentra más cercana al sector de Kamala Harris.

En esta foto del 22 de diciembre de 2014, Leondra Kruger se dirige a la Comisión de Designaciones Judiciales durante su audiencia de confirmación ante la Corte Suprema de California en San Francisco.

Michelle Childs

Otro nombre fuerte del círculo íntimo de Biden es la actual jueza de la corte federal de Carolina del Sur, Michelle Childs, quien trabajó en la campaña del presidenciable demócrata en 2020, asegurándole el triunfo en las primarias en Carolina del Sur, y trabajando de cerca con las autoridades electorales del Estado, que casi gana Biden bajo acusaciones de fraude.

Desde el mes pasado, Biden le devolvió el favor a Childs nominándola para la Corte de Apelaciones de EE.UU. para el Circuito del Distrito de Columbia, pero su aprobación sigue pendiente.

Graduada de la Facultad de Derecho de la Universidad de Carolina del Sur, Childs no tiene el pedigrí de la Ivy League que comparten los jueces que usualmente llegan a la Corte Suprema.

De 55 años, la jueza afroamericana tiene un profundo conocimiento del sistema electoral norteamericano, y muchos dicen que Biden podría querer nominarla para defender las futuras causas de fraude electoral que podrían llegar al máximo tribunal en el futuro.

Cabe recordar que este viernes, la Corte Suprema de Pensilvania dio un enorme guiño a favor de las acusaciones de fraude electoral, y prohibió el voto por correo universal en el Estado, por lo que el tema sigue caliente y en un año electoral, su nominación podría ser clave.

La jueza J. Michelle Childs, quien fue nominada por el presidente Barack Obama para el Tribunal de Distrito de EE. UU., escucha durante su audiencia de nominación ante el Comité Judicial del Senado en el Capitolio en Washington, el 16 de abril de 2010.

Kamala Harris

La actual vicepresidente fue una de las candidatas principales de Obama en 2016 cuando el demócrata debía reemplazar al juez conservador Antonin Scalia. Finalmente terminó optando por Merrick Garland, quien fue boicoteado por el Senado con mayoría republicana y el puesto quedó en manos de Neil Gorsuch, nominado por Trump.

La experiencia dejó muy marcada las intenciones de la Corte Suprema de la ex fiscal general de California, quien incluso sonaba para ser la nominada en un eventual gobierno demócrata que venciera a Trump en 2020 sin ella.

A pesar de que la madre de Kamala Harris es de la India, y ella se considera hindú, su padre es un jamaiquino mulato, cuya madre (la abuela paterna de Kamala) era afroamericana. Por lo tanto, según la prensa, Kamala es afroamericana portener una abuela negra y sería considerada como el resto de las mencionadas.

Si bien es prácticamente imposible que Kamala Harris deje el cargo de vicepresidente para asumir en la Corte Suprema, algo para lo que no hay precedentes, varios medios demócratas reportaron esta información y algunos dicen que Biden lo está considerando seriamente.

Según una reciente nota en Politico, hay una fuerte disputa entre el equipo de Biden y el equipo de Kamala en la Casa Blanca. La esposa del presidente, Jill Biden, cree que Kamala está constantemente boicoteando y operando en contra de Joe, para apurar su renuncia por edad y poder ser ella la máxima mandataria.

Es poco probable, pero nominarla apropósito sería una jugada para sacársela de encima y poder designar un vicepresidente más cercano al círculo íntimo de la familia Biden.

Kamala Harris cambia el panorama electoral en Estados Unidos | El Mundo |  DW | 12.08.2020

Estados Unidos

Trump propone una profunda reforma del FBI para eliminar la influencia política de la polémica agencia de seguridad

Publicado

en

El expresidente y actual candidato republicano a la presidencia de los Estados Unidos aseguró que de volver a la Casa Blanca frenará la mudanza de la sede del FBI a Maryland, el intento de Biden por independizar a la policía federal y alejarla de los órganos de control.

La pasada semana, el candidato del Partido Republicano a la presidencia de los Estados Unidos, Donald Trump anunció uno de sus grandes objetivos para su segundo mandato referido a la nueva manera de encarar la administración del Buró Federal de Investigación (FBI).

La policía federal de los Estados Unidos ha obtenido en las últimas décadas una masiva influencia política que ha jugado en detrimento de los intereses de la población. Trump lo vivió en primera persona cuando fue presidente, y el entonces director James Comey obstruyó sus reformas, persiguió a sus funcionarios e incluso intentó crearle causas inventadas en su contra.

Ahora, Trump anunció que de ser elegido presidente, se opondría a la decisión de Biden de mover la sede del FBI, el edificio Hoover, a Maryland, en un intento del Partido Demócrata por darle total autonomía política y sacarlo de la supervisión del Presidente del país.

A través de la red social "Truth Social", Trump mencionó que la sede el FBI debería permanecer en la ciudad de Washington D.C. con el objetivo de que se encuentre a una mayor proximidad al Departamento de Justicia (DOJ) de los Estados Unidos, el cual, en la nueva estructura que piensa implementar el republicano de regresar a la presidencia, tendría un factor de control sobre el Buró Federal.

A su vez, Trump quiere facultar al FBI para que realice tareas de seguridad para contribuir como fuerza policial de la ciudad capital del país, que viene viendo un incremento en sus índices de inseguridad desde el inicio de la administración Biden.

Trump está poniendo especial énfasis en el alto índice de corrupción del organismo comandado por Christopher Wray. En los últimos años el expresidente ha sido víctima de una feroz persecución política y judicial por parte de la policía federal estadounidense, en la cual han buscado por todos los modos que el republicano no pueda presentarse a las próximas elecciones presidenciales.

En el último tiempo, Donald Trump ha realizado numerosas y furiosas críticas contra el sistema judicial y de inteligencia de los Estados Unidos, principalmente a quienes participan en la elaboración de causas judiciales para entorpecer su campaña presidencial.

El pasado martes, el expresidente acusó al FBI y al Departamento de Justicia de llevar a cabo acciones en conjunto con la administración Biden para efectuar una caza de brujas en su contra, quitarle fondos de campaña y obligarlo a quedarse en Nueva York durante semanas en vez de recorrer el país.

El plan de Biden para sacar el FBI de Washington

Luego de 15 años de discusiones acerca del reemplazo del edificio Edgar Hoover (que data de 50 años) correspondiente al FBI en Washington D.C., la actual administración parece haberse decidido por el traslado de una nueva dependencia a la ciudad de Greenbelt, Maryland, situada a alrededor de 20 kilómetros de su ubicación actual.

La elección por parte de la administración Biden de la localidad en el estado de Maryland se dio en el contexto de una contienda entre Maryland y el estado de Virginia, que históricamente albergó los edificios gubernamentales cuando se los quiere sacar de DC.

Maryland, un estado ultra-demócrata, serviría como la nueva base de operaciones del FBI, que tendría rienda suelta y se encontraría separado política y territorialmente de la Casa Blanca, para continuar con su caza de brujas contra Trump incluso si el republicano ganara la presidencia.

A partir de la elección de la nueva sede por parte de la actual administración, comenzaron a surgir ciertos interrogantes acerca del proceso de elección. El mismo senador demócrata Mark Warner, del estado de Virginia, aseguró que no se había realizado el correcto anuncio acerca de la elección de la ciudad en Maryland y lo describió como una importante interferencia política en el proceso selectivo de la Administración General de Servicios (GSA) que está encargada del manejo de los bienes inmuebles del Estado.

Para justificar la elección, Biden lanzó repentinos y sorpresivos cambios en los criterios de selección de la GSA, que anunció recientemente que ahora ponen especial énfasis en factores como la "equidad social" o "diversidad racial" a la hora de elegir dónde ubicar edificios estatales. De esta manera, se eligió el condado de Prince George en Maryland, bajo la justificación de su enorme población negra.

El gobernador republicano de Virginia, Glenn Youngkin se ha expresado fuertemente en contra de los planes de Biden, y en un reciente discurso recordó que su estado alberga actualmente a la academia del FBI, y ha recibido grandes empresas como Amazon, buscando destacar la posición estratégica del estado con respecto a la capital.

Seguir Leyendo

Estados Unidos

Elon Musk opinó sobre la persecución política a Trump: "Cuanto más intenten meterlo preso, más subirá en las encuestas"

Publicado

en

En medio de un juicio político en contra de Trump, el dueño de Tesla, SpaceX y Twitter advirtió que lo único que van a lograr los demócratas es que termine volviendo a ser presidente.

Donald Trump está atravesando una brutal persecución política por parte del Partido Demócrata, que ha iniciado más de 8 causas en su contra con el objetivo de que reciba una condena a prisión y deba bajarse de las elecciones presidenciales de noviembre.

En estos días, el líder republicano está peleando un juicio en Nueva York por un supuesto soborno que le habría dado a una actriz porno en 2016, para que no revele públicamente que había tenido relaciones con él.

La mayor evidencia que tienen los fiscales demócratas es el testimonio de la propia mujer, Stormy Daniels, y desde la defensa de Trump aseguran que el pago lo realizó su ex abogado Michael Cohen, quien utilizó su propio dinero para pagarle a Daniels, sin nunca consultarlo con Trump.

En este contexto, el hombre más rico del mundo, Elon Musk, quien recientemente recomendó invertir en Argentina, opinó sobre la persecución contra Trump, y advirtió: “Cuanto más injustos le parezcan al público los ataques a Trump, más subirá en las encuestas”.

El comentario de Musk surge en respuesta a un posteo de X (ex Twitter) publicado el 13 de mayo, luego de la comparecencia de Trump en el estrado y el testimonio de uno de los testigos clave, del candidato republicano Blake Masters, quien escribió: "Es difícil expresar con palabras la asombrosa corrupción del tribunal canguro de Alvin Bragg en la ciudad de Nueva York".

La advertencia tiene que ver también con que el expresidente lidera las encuestas en todos los estados en disputa, excepto Wisconsin. Trump está por delante en Arizona, Georgia, Pensilvania, Virginia, Michigan, Carolina del Norte y en Nevada.

Seguir Leyendo

Estados Unidos

Trump y Biden aceptaron hacer un debate presidencial el próximo 27 de junio en los estudios de CNN

Publicado

en

Los mandatarios se cruzarán en el debate de la emisora demócrata. El republicano jugará de visitante.

El presidente Joe Biden y el expresidente Donald Trump aceptaron una invitación de CNN para debatir el 27 de junio, un enfrentamiento que romperá el récord por ser el más temprano en una campaña presidencial, que marcará la pauta las elecciones de este año.

Recibí y acepté una invitación de @CNN para un debate el 27 de junio. Depende de usted, Donald. Como dijiste: en cualquier lugar, en cualquier momento y en cualquier lugar”, dijo Biden en una publicación en X.

Trump le respondió inmediatamente a Kaitlan Collins, periodista de CNN: "La respuesta es sí, lo aceptaré". El republicano confirmó que no tiene ningún problema en "jugar de visitante" y le aclaró a la CNN: "Pongan el moderador que quieran, no les tengo miedo".

Según un comunicado de prensa de CNN, el debate se llevará a cabo en los estudios de la cadena en Atlanta sin audiencia presente, algo que nunca había ocurrido en los debates entre candidatos presidenciales, ni siquiera cuando estaba la pandemia.

Más tarde el miércoles por la mañana, ambos mandatarios confirmaron que habían aceptado otra invitación de ABC para celebrar un segundo debate el 10 de septiembre.

A pesar de sus claros problemas de senilidad, Biden dijo recientemente que tenía ganas de debatir con Trump, aunque no se comprometió con el formato de dicho debate y le dijo al locutor de radio Howard Stern: "Estoy feliz de debatir con él".

En un patético video en las redes sociales que luego ratificó en una carta a la Comisión de Debates Presidenciales, Biden expuso los términos propuestos, incluidas posibles fechas de debate en junio y septiembre.

El video de Biden hablando directamente a una cámara publicado el miércoles por la mañana se viralizó por la enorme cantidad de edición que se le tuvo que hacer, probablemente debido a la dificultad del actual presidente para hablar de corrido.

Donald Trump perdió dos debates contra mí en 2020. Desde entonces no se ha presentado a ningún debate. Ahora actúa como si quisiera debatir conmigo de nuevo”, dijo Biden.

Bueno, alégrame el día, amigo, incluso lo haré dos veces. Así que elijamos las fechas, Donald. He oído que estás libre los miércoles”, continuó Biden , en alusión al calendario judicial de Trump. En la carta, la campaña de Biden reconoció que el primer debate probablemente tendría lugar después de que concluya el juicio criminal de Trump por la presecución política de su gobierno.

En una publicación en Truth Social el miércoles, Trump aceptó el cronograma revisado: "Estoy listo y dispuesto a debatir contra Delincuente Joe en los dos momentos propuestos en junio y septiembre", y agregó que "recomendaría firmemente" más de los dos debates propuestos. . Un alto asesor de Trump le dijo a CNN que están “listos para debatir” con Biden y revisar los términos, pero que están ansiosos por un enfrentamiento en el escenario.

El equipo de Trump también pidió que los candidatos participaran en cuatro debates en total, el doble de lo solicitado por Biden. La campaña de Biden por el momento no ha aceptado la propuesta.

El formato está en línea con una propuesta de la campaña de Biden a la comisión en su carta, que Trump rechazó en su publicación de Truth Social, diciendo que preferiría, “para propósitos de emoción, un lugar muy grande, aunque Biden supuestamente tiene miedo de multitudes”.

Sólo dime cuándo estaré allí”, dijo Trump, y remató: "¡¡¡Preparémonos para la fiesta!!!"

Seguir Leyendo

Tendencias