Seguinos en redes

Ucrania

Banco Mundial anuncia que el costo de la reconstrucción de Ucrania será superior a 411 mil millones de dólares

Publicado

en

La reconstrucción de la economía de Ucrania costará, como mínimo 2,6 veces el producto bruto interno de Ucrania en 2022, según un nuevo estudio conjunto del Banco Mundial, las Naciones Unidas, la Comisión Europea y el gobierno ucraniano.

Un informe del Banco Mundial ha estimado que a Ucrania le costará, como mínimo, US$ 411 mil millones de dólares a lo largo de los próximos 10 años para recuperarse y reconstruirse de la invasión rusa, lo que sería 2,6 veces el Producto Bruto Interno del país para 2022.

El informe publicado el miércoles asegura que las estimaciones "deben considerarse como mínimos, ya que las necesidades continuarán aumentando mientras continúe la guerra", lo cual supone que, con el tiempo, el valor estimado aumente.

Producida conjuntamente por el gobierno de Ucrania, el Banco Mundial, la Comisión Europea y las Naciones Unidas, esta valuación marcó un aumento significativo de los 349 mil millones de dólares estimados en un informe publicado por el Banco en septiembre, que se suman a los 180 mil millones de dólares que ya se han enviado hasta la fecha.

La magnitud de esta ayuda no tiene precedentes. La última vez que se había ayudado tanto a otro país a una guerra fue durante la Segunda Guerra Mundial, cuando el presidente Harry Truman aprobó el “Plan Marshall”, que destinó US$ 13.000 millones de dólares en un plazo de 4 años (que se terminó extendiendo hasta 10) para enviar dinero a Europa para que pueda reconstruirse.

En dólares de 2023, el Plan Marshall costó un equivalente a US$ 173.000 millones de dólares, varios millones menos que lo que gastó la OTAN en ayudar a Ucrania en tan solo 1 año de guerra.

Como en aquél entonces, la ayuda fiscal estadounidense fue más certera y menos vacilante que la respuesta europea, debido al menor grado de exposición de su sistema energético al abastecimiento ruso. El grueso de los desembolsos a Ucrania se produjeron en los primeros 4 meses la guerra, para luego volver a tomar relevancia entre noviembre y diciembre del año pasado, bajo la idea de que se estaba por vencer a Rusia.

Hasta la fecha, según el Banco Mundial, la invasión de Rusia ha deshecho 15 años de progreso económico en Ucrania, reduciendo su producto interno en un 29% y empujando a 1,7 millones de ucranianos a la pobreza.

El informe detalla parte del costo económico y humano de la guerra de agresión iniciada por Rusia, incluidos casi 2 millones de hogares dañados, más de una de cada cinco instituciones de salud pública dañadas, 650 ambulancias dañadas o robadas y al menos 9.655 civiles confirmados muertos, incluidos 461 niños.

El informe calcula 135 mil millones de dólares en daños directos a edificios e infraestructura hasta el momento, sin contar las consecuencias económicas más amplias del conflicto, que ya lleva más de un año.

El personal de emergencia trabaja en el sitio donde un edificio residencial fue gravemente dañado por un ataque ruso en Dnipro

El informe estima que Kiev requerirá, de los 411 mil millones de dólares, 14 mil millones para la reconstrucción crítica y prioritaria, así como para inversiones de recuperación solo en 2023.

La reconstrucción de Ucrania "llevará varios años", aseguró el miércoles la vicepresidenta del Banco Mundial para Europa y Asia Central, Anna Bjerde, quien también elogió la resiliencia y determinación de Ucrania para abordar las necesidades urgentes de recuperación y reconstrucción.

A pesar del ataque de Rusia, Ucrania continúa manteniendo servicios públicos esenciales, incluyendo mantener abiertas escuelas y hospitales, pagar los salarios de maestros y funcionarios públicos, así como pagar pensiones, dijo el Banco Mundial en febrero.

El informe dijo que era esencial mantener el gobierno de Ucrania, el sector empresarial privado y los esfuerzos de recuperación. Si Ucrania pospone la reconstrucción, corre el riesgo de que el país "se establezca en una situación de bajo o nulo crecimiento y enfrente enormes desafíos sociales una vez que termine la guerra", remarcó el banco.

"Apoyar estos servicios críticos sigue siendo una prioridad, y Ucrania necesita alrededor de 3-4 mil millones de dólares por mes para sostenerlos", escribió Bjerde. "El apoyo continuo a Ucrania es una inversión tanto en el país como en la economía global. El apoyo de los asociados para el desarrollo a la inversión pública debe complementarse con una inversión privada significativa para aumentar la financiación disponible para la reconstrucción", señalo la vicepresidenta.

Destrucción del territorio ucraniano

No obstante, Bjerde también afirmó que el daño podría haber sido aún peor si no fuera por la defensa de las fuerzas ucranianas, que han sido exitosas en mantener la mayor parte de las destrucciones en las regiones de primera línea de Donetsk, Jarkiv, Luhansk y Jerson.

Por su parte, el Fondo Monetario Internacional aseguró el martes que llegó a un acuerdo a nivel de personal con Ucrania para un paquete de financiamiento de cuatro años por valor de unos 15.600 millones de dólares.

El sector energético de Ucrania ha visto el mayor aumento en el daño recientemente como resultado de los ataques dirigidos de Rusia a la red eléctrica y otros centros de energía durante el invierno en un intento por congelar a la población ucraniana y el liderazgo en Kiev para someterlos.

En este sentido, el daño total al sector energético es ahora cinco veces mayor que el verano pasado, dijo el Banco Mundial. "La infraestructura energética, la vivienda, la infraestructura crítica, la economía y el desminado humanitario son nuestras cinco prioridades para este año", dijo el Primer Ministro de Ucrania, Denys Shmyhal, en un comunicado el miércoles.

Shmyhal también advirtió que "la cantidad de daños y las necesidades de recuperación actualmente no incluyen datos sobre la pérdida de infraestructura, viviendas y negocios en los territorios ocupados"; y señaló que las autoridades ucranianas comenzarán los trabajos de restauración en estos territorios cuando sean liberados.

Ilustración del Banco Mundial

Estados Unidos

Estados Unidos amenaza con desatar la Tercera Guerra Mundial: Blinken confirmó que quieren sumar a Ucrania a la OTAN

Publicado

en

Blinken insta a enviar más ayuda para Ucrania a medida que la OTAN se prepara para ingresar al país en guerra con Rusia a la alianza militar.

El secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, dijo este jueves que Ucrania "sin dudas" eventualmente se unirá a la OTAN, ya que el apoyo al país sigue siendo "sólido como una roca" entre los estados miembros.

"Ucrania se convertirá en miembro de la OTAN. Nuestro propósito en la cumbre es ayudar a construir un puente hacia esa membresía", dijo Blinken a los periodistas en Bruselas.

Cabe aclarar que el ingreso de esta nación a la organización del Atlántico forzaría a todos los actuales miembros, entre ellos Estados Unidos, a defender militar y personalmente a Ucrania, lo cual si sigue en guerra con Rusia, implicaría inmediatamente una declaración de guerra al país que lidera Vladimir Putin.

"Basado en lo que escuché hoy… todos, incluido Estados Unidos, van a redoblar y, según sea necesario, profundizar sus esfuerzos para encontrar los recursos que Ucrania sigue necesitando", dijo Blinken a los periodistas después de reunirse con los ministros de Relaciones Exteriores de la OTAN en la sede de la alianza.

Si bien los miembros individuales de la OTAN han estado proporcionando armas a Ucrania, la organización en su conjunto se ha concentrado en brindar ayuda no letal por temor a una escalada de tensiones con Rusia a través de una participación más directa.

"Más de 30 países han firmado o están en proceso de negociar acuerdos bilaterales con Ucrania, y nosotros mismos, Estados Unidos, estamos trabajando en nuestro propio acuerdo bilateral", dijo.

Más temprano el jueves, Blinken se reunió con el Ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, en Bruselas, donde ambos discutieron la situación en el campo de batalla y las formas de reforzar el sector energético de Ucrania a la luz de los continuos ataques de Rusia.

Estados Unidos será el anfitrión de una cumbre de la OTAN en Washington del 9 al 11 de julio. Blinken discutió las prioridades para la reunión con Kuleba mientras la OTAN celebra su 75º aniversario, y allana el camino para el eventual ingreso de Ucrania.

"Ucrania se convertirá en miembro de la OTAN", dijo Blinken. "Nuestro propósito de la cumbre es ayudar a construir un puente hacia esa membresía y crear un camino claro para que Ucrania avance".

Seguir Leyendo

Ucrania

Diplomacia en llamas: Ucrania desafía al Papa por llamar a la paz con Rusia y rechaza negociar con el "Dragón de la Guerra"

Publicado

en

La Embajada Ucraniana arremetió contra las palabras del Papa Francisco, asegurando que nadie le pidió a los Aliados que negocien la paz con la Alemania Nazi en la Segunda Guerra Mundial.

En un enfrentamiento diplomático sin precedentes, la Embajada de Ucrania cruzó a la Santa Sede y respondió con contundencia a las recientes declaraciones del Papa Francisco, quien abogó por la negociación de paz y el coraje de la "bandera blanca" en el conflicto ucraniano.

La embajada, a través de sus redes sociales, lanzó un mensaje desafiante, recordando la historia y cuestionando la posibilidad de entablar conversaciones con lo que denominan "el dragón de la guerra".

La Segunda Guerra Mundial se convirtió en el epicentro del debate, con la Embajada ucraniana argumentando que durante aquel conflicto nadie consideró seriamente negociar la paz con Hitler, y vencer al Nazismo era la única opción viable.

"¡Es muy importante ser coherentes! Cuando hablamos de la Tercera Guerra Mundial, que enfrentamos ahora, debemos aprender las lecciones de la Segunda Guerra Mundial", expresó la liga diplomática ucraniana en un tono desafiante.

"¿Alguien habló seriamente de las negociaciones de paz con Hitler y de la bandera blanca para satisfacerlo? Así que la lección es solo una: ¡si queremos terminar la guerra, tenemos que hacer todo lo posible para matar al Dragón!", concluyó el mensaje, elevando la tensión en el ya complicado escenario internacional.

La entrevista del Papa Francisco a la Radio Televisión Suiza desató la controversia al instar a la valentía de la "bandera blanca" y a la negociación como medios para poner fin al conflicto en Ucrania. El pontífice destacó que negociar no es rendirse y abogó por la intervención de las potencias internacionales en el proceso de paz.

Sin embargo, la Embajada Ucraniana se mantuvo firme en su posición, desestimando la perspectiva papal y centrándose en la analogía con la Segunda Guerra Mundial para respaldar su postura contra las negociaciones.

El Vaticano, en un intento de suavizar la controversia, matizó que el Papa no se refería a la rendición, sino a la negociación como un medio para alcanzar un cese de hostilidades. Matteo Bruni, portavoz vaticano, aclaró que el término "bandera blanca" simbolizaba la tregua lograda mediante la valentía de la negociación.

A pesar de este intento de aclaración, la Embajada Ucraniana persiste en su posición, instando a la comunidad internacional a no ceder ante la idea de negociar con lo que ellos denominan el "Dragón".

El enfrentamiento entre la fe y la política internacional ha avivado las llamas de la diplomacia, generando incertidumbre sobre el futuro de las relaciones entre Ucrania y la Santa Sede. Las tensiones geopolíticas se intensifican en un momento en que la comunidad internacional observa con atención la evolución del conflicto ucraniano.

La firmeza de la Embajada Ucraniana en su rechazo a las negociaciones, junto con las palabras del Papa Francisco, sitúan a esta disputa en el epicentro de un debate crucial sobre la paz, la valentía y la estrategia diplomática.

Seguir Leyendo

Hungría

Orbán anunció que dejará de bloquear las ayudas a Ucrania después de conversar con Zelenski en la asunción de Milei

Publicado

en

Se trata de un paquete por 50.000 millones de euros que necesita la aprobación de Hungría para poder desplegarse. A cambio del visto bueno para las ayudas, el Gobierno de Orbán exigirá una mayor ampliación de los fondos habilitados para financiar las necesidades fiscales de Hungría de manera no inflacionaria.

Después de haber entablado conversaciones durante la ceremonia de asunción del presidente Javier Milei, el presidente Volodímir Zelenski de Ucrania y el Primer Ministro Viktor Orbán de Hungría arribaron a una histórica reconciliación en representación de ambos países.

Lo que no pudieron conseguir meses de negociación diplomática, lo pudo conseguir una invitación del presidente Milei en cuestión de pocas horas. A partir de este encuentro, el Gobierno de Orbán anunció que dejará de bloquear las ayudas de la Unión Europea para Ucrania a través de Hungría.

De esta manera, Hungría abre las puertas para un paquete de financiamiento de hasta 50.000 millones de euros (equivalentes a 50.000 millones de dólares) para Kiev, en una fuerte señal en contra del alineamiento con Rusia. Los recursos serían empleados en la financiación de nuevo armamento, alimentos y energía.

Los recursos son de vital importancia para Ucrania, que debe sostener un déficit primario superior al 14% del PBI para las demandas del conflicto bélico. Asimismo, el resultado financiero total de Ucrania marcó un rojo de casi 20 puntos del PBI en 2023, según la última estimación del Fondo Monetario Internacional (FMI) correspondiente a octubre.

El gasto militar disparó las erogaciones de Ucrania hasta el umbral del 66% del PBI en 2022, y más de 63% estimado para 2023. Sin embargo, los ingresos a duras penas fluctuaron entre el 43% y el 50% del PBI desde el estallido de la guerra, pese a las medidas de emergencia adoptadas por Zelenski. 

En solo dos años, la deuda bruta de Ucrania se incrementó drásticamente del 49% del PBI a más del 78% en 2022, y más de 88% para el cierre de 2023. El FMI sugiere que el stock relativo de la deuda continuará creciendo por lo menos hasta 2025, y en el marco de una economía virtualmente devastada por una guerra en su propio territorio.

A cambio de aprobar el paquete de ayuda, el Gobierno de Orbán exige que la Unión Europea regularice los envíos de fondos adeudados por desembolsar en Hungría, los cuales ascienden a los por lo menos 30.000 millones de euros. Esto incluye el financiamiento para cubrir los desajustes sobre las finanzas públicas.

La UE había retrasado sistemáticamente la entrega de estos fondos por cuestiones meramente políticas y discrecionales. El déficit primario de Hungría comenzó a reducirse a partir del segundo trimestre de 2023, y se espera una mayor convergencia para las reglas de Maastricht a partir del año fiscal 2024.

Hungría también daría su visto bueno para la ampliación de los recursos presupuestados en el financiamiento de la protección fronteriza, una demanda recurrente por parte de Budapest, y también la concesión de subsidios adicionales sobre la energía en respuesta al shock de precios relativo que provocó la guerra en Ucrania.

Seguir Leyendo

Tendencias