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¿Quién es Nelson Teich, el nuevo ministro de Salud que designó Bolsonaro?

El perfil del nuevo ministro de Salud de Bolsonaro, un histórico oncólogo del país, experto en gestión de la salud y que ya había trabajado con la entidad gubernamental, hoy asume el cargo en tiempos de crisis. ¿Quién es el Dr. Nelson Teich?

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Jair Bolsonaro anunció este jueves, desde el Palacio de Planalto, la remoción del ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta y, en su lugar, designó al oncólogo Nelson Luiz Teich como su reemplazo. 
El Presidente denunció que Mandetta estaba haciendo política en vez de gestión desde el Ministerio, y que no le quedó otra opción que removerlo del cargo. En este contexto de grandes desafíos por la crisis sanitaria mundial y, bajo el antecedente que deja Mandetta con Bolsonaro, el Dr. Nelson Teich tiene un gran desafío por delante.
El nuevo ministro llegó a Brasilia este jueves por la mañana y se reunió con Bolsonaro en el Palacio de Planalto. El Presidente, luego se reunió con Mandetta y le informó que sería despedido, presentándole también a quien sería su reemplazo.

“No condeno, no recrimino y no critico al ministro Mandetta. Hizo lo que, como médico, pensó que debería hacer en ese tiempo. La separación, cada vez más, se hacia realidad. Pero no podemos tomar decisiones de forma que el trabajo realizado hasta el momento se pierda. Lo que hablé durante ese tiempo con el oncólogo doctor Nelson, aquí a mi lado, fue hacerle entender la situación en general”, dijo el Presidente.

“¿De qué hablé con el Dr. Nelson? Tenemos que abrir gradualmente el trabajo en Brasil. Esta gran masa de personas humildes no pueden quedarse adentro de sus casas” agregó y concluyó, poniendo paños fríos a la cuestión con mucha cordialidad. “En este momento, además de agradecer al Sr. Henrique Mandetta por su cordialidad y cómo dirigió el Ministerio, agradezco al Dr. Nelson por aceptar esta invitación. Él conoce el enorme desafío que se avecina”.

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Mandetta, que había sido diputado federal y, parece que le gustó más la política que la medicina, ha dirigido el Ministerio de Salud desde enero de 2019, cuando Bolsonaro asumió el cargo. 

Bolsonaro confirmó que desde el comienzo de la pandemia, se dirigió a todos los ministros por igual y a todos les comunicó que no había que tomar medidas políticamente correctas, sino que había que trabajar sobre “la vida y el empleo”. 

“Es como un paciente que tiene dos enfermedades. No podemos abandonar una y tratar exclusivamente otra, porque al final de la línea este paciente puede perder la vida”, declaró el Presidente.

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Perfil del nuevo ministro: ¿Quién es el Dr. Nelson Teich?

Nelson Teich fue responsable en la década del ’90 de la fundación del Centro Integrado de Oncología (Grupo COI), donde trabajó hasta 2018. Actualmente, según su perfil en una red social, trabaja como consultor en gestión de la salud.
Desde septiembre del año pasado hasta enero de este año, también de acuerdo con su perfil, Teich proporcionó orientación a la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Insumos Estratégicos (SCTIE) dirigida por Denizar Vianna que, a su vez, respondía al mismo Ministerio de Salud de Mandetta.
Teich tiene un título en medicina de la Universidad Estatal de Río de Janeiro, y fue residente de oncología en el Instituto Nacional del Cáncer. Luego, enfocó su capacitación en el área de gestión de la salud, mientras cursaba un MBA en la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) y una maestría en la Universidad de York (Reino Unido) se centró en el tema. Sus estudios indican que es un experto en oncología y en gestión de la salud.
Entre 2010 y 2011 fue consultor para el Hospital Israelita Albert Einstein, en São Paulo. A su vez, Teich fue uno de los socios fundadores del Instituto de Educación e Investigación MDI, donde fue socio de Denizar Vianna.

El nuevo ministro de Salud dio un discurso en la conferencia en el Planalto, donde aseguró que hay una “alineación completa” entre él, Bolsonaro y “todo el grupo ministerial”.

Dejo en claro que hay una alineación completa aquí entre mí, el Presidente y todo el grupo ministerial. Realmente lo que estamos haciendo aquí hoy es trabajar para que la sociedad pueda reanudar una vida normal cada vez más rápido y trabajamos para el país y la sociedad“, dijo.

Nelson Teich también dijo que discutir sobre salud y economía durante una pandemia “es muy malo” porque las dos áreas “no compiten entre sí”. También le avisó a los medios que le hace muy mal a la sociedad polarizar esta crisis “como si fuera personas versus dinero, bien versus maldad, empleo versus enfermedad”.

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Esta mañana, Bolsonaro dio una entrevista exclusiva junto al flamante nuevo ministro de Salud, donde aclaró ciertos temas. Aseguró que “como todos los ministros de mi gobierno”, el Dr. Teich es pro-vida. Además, aseguró que está abierto al uso de la hidroxicloroquina, un anti-viral que sirve de tratamiento para el COVID-19 y que los estudios preliminares y la experiencia de EE.UU., Corea del Sur y Japón vienen dando resultados esperanzadores para vencer al coronavirus.

Este había sido un punto de choque entre Bolsonaro y el ex-ministro Mandetta, ya que este último se negaba a habilitar el uso y el estudio de este medicamento en los más de 30.000 casos que tiene Brasil.

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La Corte Suprema de Brasil analiza bloquear Telegram, WhatsApp y Twitter en todo el país para censurar a la oposición

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Alexandre de Moraes, principal juez responsable de censurar a la oposición en Brasil, dijo que el bloqueo masivo no es una medida que adoptaría “en estos momentos”, pero el resto del STF tiene tiempo de votar hasta el 26 de abril.

El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, controlado por el presidente Lula da Silva, inició este viernes un proceso para analizar la posibilidad de bloquear aplicaciones de mensajería, como WhatsApp y Telegram, en Brasil.

El análisis se desarrollará mediante videoconferencias hasta el 26 de abril, fecha en la que los jueces tomarán la determinación sobre si el máximo tribunal puede suspender temporalmente el funcionamiento de las aplicaciones de mensajería que se nieguen a entregar información de los usuarios investigados por delitos sin sentencia firme.

Esta votación se da en medio de fuertes denuncias de persecución política contra el gobierno de Lula, que está utilizando a los jueces de la Suprema Corte para censurar a la oposición en redes sociales, solicitando eliminar cuentas y borrar publicaciones. Incluso La Derecha Diario ha sido víctima de esto.

El principal juez señalado por ser el brazo armado del Gobierno socialista es Alexandre de Moraes, responsable de ordenar el bloqueo de miles de usuarios opositores a Lula en Twitter. Sin embargo, Moraes anticipó su voto en contra de la medida, probablemente para evitar un mayor escándalo en medio de un conflicto judicial abierto contra Elon Musk y la oposición.

Moraes, se unió al juez Edson Fachín diciendo que la medida no parecería necesaria en estos momentos, pero sorprendió su voto negativo ya que él mismo ha sido responsable en el pasado de bloquear temporalmente a Telegram, luego de que la empresa se negara a entregar información personal de sus usuarios. Hasta el momento, los otros nueve jueces aún no han votado.

La presentación de esta acción en los tribunales se inició en 2016, a través del partido Ciudadanía. El proyecto se basó en una decisión del Tribunal de Sergipe, que ordenó la suspensión de WhatsApp en todo el territorio nacional por un período de 72 horas.

WhatsApp se había negado a romper la confidencialidad de los mensajes de la aplicación cuando el tribunal pidió mensajes privados de las personas en un caso vinculado a la libertad de expresión.

En aquel entonces Facebook (ahora Meta) afirmó que los mensajes están cifrados de un extremo a otro, lo que significa que ellos no almacenan en los sistemas de la aplicación los mensajes ni pueden entregarlos, y que solo el usuario puede hacerlo.

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Brasil

Los inversores internacionales huyen de Brasil y ya sacaron casi 5.000 millones de dólares del país por las medidas de Lula

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Mientras se escapan los inversores de Brasil, el tipo de cambio del real con respecto al dólar ascendió a las 5,27 unidades y marcó una suba del 1,6% al cierre del día martes. Se trata del valor nominal más elevado de la gestión de Lula.

El dólar acumuló un alza del 8,7% de acuerdo a su paridad con el Real de Brasil desde el comienzo del año. Pero solamente al término de la rueda del día martes, el tipo de cambio se anotó una suba diaria superior al 1,6% y volvió a romper récords nominales.

La paridad del dólar llegó a los 5,27 reales al cierre del martes, el mayor valor registrado desde marzo del año 2023. La fuerte depreciación de la moneda brasileña destacó de entre otras divisas latinoamericanas que se vieron duramente afectadas por el accionar monetario conservador que recientemente adoptó la Reserva Federal de Jerome Powell.

La tasa de inflación de Estados Unidos para el mes de marzo superó las expectativas (subió ligeramente al 3,5%), con lo cual es más probable que la FED evite reducir su tasa de referencia en el corto plazo, o en su defecto que lo haga más lentamente. Esto repercutió en todas las divisas de la región, pero Brasil se vio afectado además por factores estrictamente internos.

La política fiscal del Gobierno socialista está fuera de control. El resultado primario del Gobierno federal (sin Estados locales ni municipalidades) marcó un rojo equivalente al 2,55% del PBI en febrero, el más alto desde el estallido de la pandemia. El Presidente Lula da Silva asumió su cargo habiendo heredado un superávit primario de 0,56 puntos del PBI en enero del año pasado.

Contabilizando la pesada carga de intereses que enfrenta el país vecino, el resultado financiero marcó un déficit récord de hasta el 7,7% del PBI en febrero, y no se veía algo semejante desde julio de 2021. Cabe señalar que cuando Lula asumió la presidencia del país, el déficit financiero representaba el 4,32% del producto bruto, casi se duplicó en 13 meses.

El Gobierno socialista cuestionó con dureza la independencia del Banco Central de Brasil, heredada de la administración de Jair Bolsonaro, pero al no poder revertir su autonomía se valió del endeudamiento como vía principal para solventar la brecha fiscal. La carga de intereses por la deuda pública se incrementó del 4,88% al 5,15% del PBI desde enero de 2023.

El descarrilamiento de la política fiscal hace mecha sobre la efectividad de la política monetaria, ya que pese a la autonomía legal, existen serias dudas sobre el sostenimiento del actual margen de déficit con persistente endeudamiento. En consecuencia, se reduce el efecto disciplinario de la tasa de referencia SELIC que aplica la autoridad monetaria, y con ello se proyecta un mayor impacto negativo sobre el nivel de actividad real.

Este contexto adverso provocó que Brasil pierda cada vez más atractivo para la inversión internacional. La firma Goldman Sachs recomendó abiertamente deshacer las posiciones en empresas públicas brasileñas debido a una mayor injerencia política del Gobierno, y como resultado de la falta de credibilidad en el desempeño futuro de Brasil, se registró una salida de por lo menos US$ 4.227 millones (21.000 millones de reales) por parte de inversores extranjeros en el país.

La repercusión de la depreciación del real será mayormente negativa sobre el saldo exportador de las empresas argentinas, más aún en un contexto de fuerte apreciación del peso frente al dólar.

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Reforma agraria en Brasil: Lula lanza un grotesco programa socialista para colectivizar la producción del campo

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El Gobierno expropiará y repartirá discrecionalmente un total de 295.000 hectáreas de tierras públicas y privadas a indígenas y desempleados. El Estado se adueñará de una parte de todo lo que se produzca en las nuevas tierras reasignadas.

Con la asunción del socialismo en Brasil en enero del año pasado, se produjo un cambio radical en la política agraria del país. Se le puso fin a la concesión flexible de derechos de propiedad que emprendía la gestión Bolsonaro, y en su lugar, la administración de Lula da Silva lanzó una nueva reforma agraria a-la-China por decreto y sin pasar por el Congreso.

La reforma comprende el reparto de hasta 295.000 hectáreas de manera completamente discrecional, es decir, serán asignadas a dedo por Lula dependiendo de algún criterio arbitrario por parte de las autoridades competentes.

Las tierras se repartirán a indígenas y personas desempleadas. Con esta maniobra, el PT busca engrosar su influencia sobre los estratos más débiles de la población rural, que ahora podrían verse sometidos a una relación clientelista con el Gobierno.

El reparto afectará tanto a tierras de propiedad estatal como tierras privadas, que serán deliberadamente expropiadas en caso de que se determine el “abandono” por parte de sus propietarios, la misma excusa que utilizó el dictador chino Mao Tse Tung durante las reformas agrarias en China en la década del ’50.

A la par de estos movimientos, el Gobierno también lanzará un esquema de créditos subsidiados (y artificialmente baratos) para financiar la adquisición de maquinaria y semillas, con el fin de abastecer la eventual producción agrícola en las nuevas tierras reasignadas. 

La mayor parte de la agricultura prevista para estos campos será meramente familiar y de subsistencia, sin mayores dotes de productividad y sin la posibilidad de generar exportaciones o divisas al país.

Esto es evidencia de la pésima asignación de recursos implícita en la reforma agraria del socialismo. Se retienen recursos valiosos que podrían haberse utilizado en otras áreas de la economía para producir más eficientemente, creando puestos de trabajo mejor remunerados.

Pero pese a todo esto, la reforma agraria de Lula establece que el Estado podrá apropiarse de una parte de toda la producción realizada en esas tierras, dando forma a una incipiente colectivización de la producción agraria.

Reformas agrarias de esta índole fueron implementadas en diversas partes del mundo, como por ejemplo México (1917), Bolivia (1953), Guatemala (1951), Cuba (1959) y Chile (1962-1973), y todas ellas registraron pésimos resultados en materia de productividad y eficiencia asignativa.

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