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Estados Unidos

Trump cuestionó el sistema de cómputo electoral Dominion y Smartmatic: “eliminó 2,7 millones de votos míos en todo el país”

Luego de que se descubriera que “por error” el software Dominion contabilizó más de 6.000 votos para Biden que luego en un recuento se confirmó que habían sido para Trump, el Presidente tuiteó acerca del verdadero alcance de fraude de este sistema.

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En la tarde del 12 de noviembre, el Presidente Trump acudió a Twitter para dar novedades acerca del estado de la elección. Hoy se cumplen 10 días desde que se votó en Estados Unidos pero todavía muchos lugares siguen contando votos, otros están yendo a recuentos o están entrando en largos procesos legales.

Si bien Trump todavía no habló públicamente desde la tarde siguiente a la elección, cuando todos los medios cortaron la conferencia de prensa que estaba dando, viene publicando en sus redes sociales acerca de los avances de las investigaciones de la elección casi a diario.
En tal vez el mensaje más convincente hasta ahora, apuntó directamente contra el sistema informático “Dominion”, un inseguro sistema de procesamiento de votos que se utiliza en 28 Estados de todo el país y tiene vínculos con el Partido Demócrata.
El pasado 7 de noviembre, se descubrió que en el Estado de Michigan, más de 6.000 votos computados por Dominion fueron otorgados al Partido Demócrata, pero finalmente en un recuento a mano se descubrió que estos votos eran todos para Trump y su lista de candidatos republicanos. Esta corrección, de hecho, permitió que el diputado republicano Adam Kochenderfer gane una elección que hasta antes del recuento la había perdido, en el condado de Oakland.
Este sorprendente descubrimiento llevó a la administración Trump, de la mano del FBI, a investigar más de cerca este sistema.
Si bien no hay un comunicado oficial al respecto, Trump tuiteó que Dominion borró 2,7 millones de votos suyos en todo el país: “Análisis de datos encontraron 221.000 votos de Trump en Pensilvania que el sistema cambió a Biden. 941.000 votos fueron eliminados. En el resto de los Estados, 435.000 votos cambiaron de Trump a Biden“.
Trump además arrobó al medio independiente One America News Network (OANN) y a Chanel Rion, la Corresponsal de la Casa Blanca por OANN, para que informen al respecto. Todo indica que Trump tiene información preliminar que todavía no ha sido hecha pública acerca del sistema Dominion, y por lo tanto acudió a Twitter a dar la primicia.

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¿Qué es “Dominion Voting Systems”? 

El sistema Dominion es relativamente nuevo. Cada vez que un fiscal de mesa escruta un lote de votos usando las máquinas de conteo Smartmatic, esta información se guarda en tarjetas de memoria que luego son embaladas en cajas de plástico transparente, se llevan a las oficinas de las autoridades electorales del condado, quienes cargan estas tarjetas en el software de Dominion y éste publica oficialmente aquellos resultados.

Este método se usa desde hace menos de una década en más de la mitad de los Estados del país, pero particularmente, se usa en condados de cinco de los Estados más importantes de esta elección: Nevada, Arizona, Georgia, Michigan, Wisconsin, y Pensilvania. En todos Trump ha iniciado causas judiciales.

Cabe destacar que en Texas, unos meses antes de la elección, la Legislatura estatal determinó que el sistema Dominion no cumplía con los requerimientos mínimos de transparencia para ser implementado y lo prohibió para este ciclo electoral.

Dominion es parte del DELIAN Project, una organización manejada por la Fundación Clinton, a cargo del ex presidente Bill Clinton y la ex candidata Hillary Clinton. Irónicamente, en su página web aseguran que este sistema se creó para ayudar a los países del tercer mundo a tener elecciones más transparentes: “En 2014, Dominion Voting se comprometió a brindar acceso a la tecnología de votación a las democracias emergentes, a través de su apoyo filantrópico al Proyecto DELIAN, ya que muchas democracias emergentes sufren violencia postelectoral debido al retraso en la publicación de los resultados electorales

En enero de este mismo Dominion se debatió en el Comité de Administración de la Cámara de Diputados de los Estados Unidos, y se determinó que las máquinas de este sistema tenían demasiadas partes chinas y que “se corre un verdadero riesgo a una interferencia exterior de nuestro proceso democrático“, pero no fue prohibido, ya que los demócratas tienen mayoría de votos en aquella Cámara.

El CEO de Dominion Voting Systems, John Poulos, testificando ante el Congreso, reveló que dependen en gran medida de piezas chinas como pantallas LCD, condensadores de chip y resistencias de fabricación china, argumentando que en algunos casos no hay opción para fabricar esas piezas en Estados Unidos.

Una subsidiaria de Dominion es Smartmatic, las máquinas de votación que han sido tan polémicas en países como Venezuela, Filipinas e India, donde su capacidad de fraude fue ampliamente demostrada.

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El periodista Sean Hannity, uno de los más populares y más vistos de la TV estadounidense, dedicó el bloque de las 7 p.m. completo en Fox News a hablar del sistema Dominion. Desde el canal, se contactaron con la empresa sobre los errores en el cómputo de votos y ésta aseguró que fue culpa de un “error humano” no asociado con su software.

Según cuenta Hannity, este sistema fue altamente cuestionado por los mismos demócratas cuando en 2018 el republicano Brain Kemp le ganó una elección a la demócrata Stacey Abrams por un ínfimo margen.

El prestigioso profesor de Princeton, Andrew Appel, explicó en 2018: “El sistema Dominion ImageCast Evolution parece una buena máquina para votar, pero tiene una seria falla de diseño; luego de emitir tu voto y de revisar tu voto, la máquina puede imprimir más votos usando tus datos!“. En 2017, Appel testificó ante el Congreso y aseguró que Dominion no es un sistema seguro, ya que tiene demasiadas vías de acceso y que se le puede instalar un software fraudulento en tan solo 7 minutos.

Según Twitter, este segmento del programa de Hannity ameritó ponerle dos carteles: 1) “Esta afirmación de fraude electoral está disputada“, 2) “Fuentes oficiales dieron diferentes resultados“. Ninguno de los dos tiene que ver con las reales incógnitas que genera la implementación de Dominion.

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Economía

¿Nueva guerra comercial con China? Biden apunta a triplicar los aranceles para la importación de acero y aluminio

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La administración Biden amenaza con lanzar una nueva ofensiva arancelaria contra el ingreso de productos chinos, una maniobra que podría conducir a una pronta respuesta por parte del gigante asiático.

El giro proteccionista de la Casa Blanca bajo la presidencia de Joe Biden se hace cada vez más evidente. Pese a prometer lo contrario en su campaña electoral, Biden promete redoblar los aumentos tarifarios contra China y otros países del mundo.

Hasta ahora, las medidas proteccionistas del Gobierno se focalizaron en subsidios encubiertos, como por ejemplo los dispuesto en la llamada “Ley de Reducción de la inflación” del 2021. Pero esta vez se estudia abiertamente un nuevo rediseño del sistema arancelario.

El Presidente Biden propuso triplicar el arancel de importación para el acero y el aluminio provenientes de China, del 7,5% al 25%. Esta resolución amplía una anterior que ya había adoptado el expresidente Donald Trump, en virtud de la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial (establecida en 2018). Pero la ley sancionada durante la administración anterior sólo alcanzaba a unos productos específicos, y la propuesta de Biden es generalizar el aumento arancelario sin excepción en todo el sector.

Estados Unidos se constituye actualmente como el cuarto productor mundial de acero, mientras que China ocupa el primer lugar. Semejante participación en el mercado haría muy efectivo el impacto de un arancel sobre la importación de China (con beneficios positivos para la industria local), pero este tipo de medidas resultan en su mayoría estériles, debido a que se espera una pronta respuesta por parte de China y la situación volvería al punto de inicio (o aún peor debido a la persistente volatilidad).

Siguiendo el mismo patrón, la administración Biden intervendrá deliberadamente en la adquisición de US Steel por parte de inversores japoneses, un acto populista y desesperado en medio del clima de la campaña electoral.

Asimismo, el Presidente Biden propuso incrementar los aranceles para la importación de madera canadiense del 8% al 14%, sin ningún tipo de justificación convencional. Esto supone un golpe hacia uno de los mayores socios comerciales de Estados Unidos en la región.Queda en evidencia que la política comercial de Biden no se limita exclusivamente a China.

Biden despliega este paquete de propuestas como respuesta a las medidas prometidas por Trump, entre las cuales se encuentra el establecimiento de un arancel universal del 10% sobre todas las importaciones, y una tasa especial del 60% sobre todas las importaciones de China.

Como es de amplio conocimiento, la dictadura comunista en China se negó a cumplir con la liberalización total de su mercado de divisas, un requisito al que se había expresamente comprometido tras su ingreso a la Organización Mundial del Comercio (OMC) en el año 2000. En lugar de ello, solo se dio lugar a una serie de desregulaciones parciales y progresivas que, hasta el momento, no llegaron a desembocar en un mercado libre.

Las políticas proteccionistas se utilizaron como una medida coercitiva para forzar la liberalización cambiaria de China durante la administración de Donald Trump, aunque una vez finalizada la guerra comercial (2018-2020) se llegó a un nuevo status-quo sin mayores cambios en esta materia y con aranceles más elevados entre ambos países (la relación final entre ellos favoreció ligeramente a Estados Unidos).

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Estados Unidos

Tras fracasar en las negociaciones con Maduro, Biden restableció las sanciones contra el petróleo y el gas de Venezuela

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En un intento por garantizar elecciones libres en Venezuela, Biden había quitado todas las sanciones que había impuesto Trump contra el régimen chavista. Sin embargo, Maduro inhabilitó a toda la oposición y se cayó el Acuerdo de Barbados.

La gran apuesta de Joe Biden en Venezuela se convirtió en otro gran fracaso de su administración en materia de política internacional. Estados Unidos confirmó que no renovará las licencias que expirarán el jueves y volverán a entrar en vigencias las sanciones petroleras a Venezuela.

Luego de criticar la postura que había adoptado Estados Unidos durante la presidencia de Trump, cuando el republicano sancionó masivamente al régimen chavista, Biden ingresó a la Casa Blanca e implementó una estrategia de disuasión, levantando sanciones a cambio de garantías institucionales por parte de Maduro.

De esta manera, Biden llegó a levantar todas las sanciones contra el petróleo y gas, y alcanzó en 2023 el Acuerdo de Barbados, donde Maduro se comprometió a tener elecciones libres y democráticas a cambio de que le levantaran las prohibiciones.

Pero en vez de hacer un levante gradual y condicionado al proceso electoral, Biden levantó todas las sanciones y le dio un año de regalías petroleras a Maduro. Recién a unos meses del proceso electoral, el dictador chavista reveló su plan maestro, inhabilitó a toda la oposición y ahora irá a unas elecciones que legitimarán su régimen.

En este año sin sanciones, donde Chevron pudo operar abiertamente en Venezuela dejando enormes caudales de dinero que terminaron en las arcas del régimen, Maduro potenció su control del país, y no está ni cerca de ser removido del Palacio de Miraflores.

Washington había amenazado repetidamente en los últimos meses con restablecer las sanciones energéticas a menos que Maduro cumpliera sus promesas electorales que llevaron a un alivio parcial de las medidas desde octubre, pero el astuto dictador aprovechó todo el tiempo que pudo conseguir para llenar el Tesoro de petrodólares.

Biden también aprovechó el petróleo venezolano en los últimos años como una alternativa al petróleo y el gas ruso, que sí está fuertemente sancionado por Estados Unidos y que cada vez cuesta más que llegue a Occidente.

En Estados Unidos temen que las sanciones a Venezuela lleven a un nuevo recorte en la oferta mundial de barriles y que esto presione a la suba el precio del petróleo justo en un año electoral. Es por eso que Anthony Blinken, Secretario de Estado de Biden, ha dejado en claro que reinstaurar las sanciones no quiere decir que vuelvan al escenario de máxima presión contra el régimen chavista, y que seguirán permitiendo que el sector privado pida licencias específicas para operar en Venezuela.

Cualquier actividad bajo la licencia vencida deberá completarse antes del 31 de mayo, pero las empresas aún pueden volver a solicitar individualmente licencias específicas, aseguraron desde Washington. Obtener la aprobación dependerá de qué tan permisivo decida ser Estados Unidos.

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Estados Unidos

Un informe revela el lado oscuro de Powell en la Reserva Federal y expone sus intentos por bloquear las medidas de Trump

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Un nuevo archivo videográfico del periodista James O’Keefe revela como la máxima autoridad de la FED junto a otros empleados de la banca central colaboraron para impedir el éxito del expresidente.

En la última semana, un nuevo proyecto investigativo de James O’Keefe logró sacar a la luz las verdaderas intenciones del actual presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos, Jerome Powell, para entorpecer las políticas monetarias que el presidente Donald Trump propuso durante su mandato con el fin de imposibilitar su reelección.

Conjuntamente con otros empleados de la máxima autoridad monetaria en el país, Powell buscaba posicionarse como una figura moderada, bloqueando todas las medidas que tomaba Trump desde el Poder Ejecutivo, a lo largo de sus 4 años de gestión.

Si bien Powell fue designado por el propio Trump al principio de su mandato, el funcionario fue elegido por la cúpula del Partido Republicano, que en aquel entonces era anti-trumpista. Así, el entonces presidente debió lidiar todo su mandato con un “rebelde” en el Banco Central estadounidense. Hoy, permanece en sus funciones y fue ratificado en el cargo por Joe Biden, con quien colabora de cerca y sin rispideces.

La cámara oculta

A partir de una cámara oculta a la que fue sometido uno de estos altos empleados del órgano gubernamental, se descubrió un entramado de corrupción detrás de las políticas de la FED.

a la construcción de un relato asociado a políticas progresistas vinculadas a temáticas como teoría racial; feminismo y políticas medioambientales, las cuales nada tienen que ver con la estabilidad económica de un país.

Aurel Hizmo, quien se desempeña como economista en jefe de la Reserva Federal, es el encargado de elaborar los discursos de Jerome Powell en sus declaraciones públicas. También trabajó en el mismo rol durante la presidencia de Janet Yellen, quien hoy se desempeña como Secretaria del Tesoro de Biden.

Durante la cámara oculta, Hizmo aseguró que durante la administración de Trump, el presidente buscaba mantener una política de estabilidad económica, pero que Powell desde la Reserva Federal entorpecía a propósito los objetivos macroeconómicos del gobierno.

Hizmo es un especialista en finanzas pero mantiene una ideología de izquierda muy marcada, de corte progresista en sus visiones sociales y dentro del espíritu de su profesión, aboga por políticas que se relacionan con las visiones socialistas de la economía.

En la conversación que no pensaba que estaba siendo grabada, se rio de que todo esto se hablaba libremente en las reuniones de la FED, pero que nunca había salido a la luz ya que todo lo relacionado a la Reserva Federal se encuentra bajo el concepto de “información clasificada“.

La relación entre Trump y Powell

El economista de la FED tildó a Trump de ser una ”persona loca” y lo caracterizó con términos peyorativos, antes de admitir que es un fanático de Joe Biden, en relación a sus ideas económicas.

Para describir la relación entre Trump y Powell, Hizmo aseguró que ambos se llevaban extremadamente mal entre sí, al punto de que el expresidente intentó en múltiples ocasiones despedirlo del cargo, pero no podía ya que no contaba con los suficientes votos en el Senado para nombrar un reemplazo.

Según contó, en la reunión que tuvieron previo a la nominación de Powell, Trump le dijo que buscaba a alguien que sea capaz de subir las tasas de interés al principio del mandato para luego ir relajándolas a medida que creciera la economía. Sin embargo, Powell boicoteó esta visión macro de Trump ni bien llegó a la FED.

En una sintonía contraria a las intenciones de Trump por mantener una economía estable, la gestión de Joe Biden busca constantemente mantener las tasas de interés elevadas con el objetivo adicional de mantener los índices inflacionarios bajos, luego del bochornoso accionar de Powell durante la pandemia.

Hizmo incluso llegó a mencionar que Powell tiene el deseo de pasar a la historia como una clase de ”mártir que intentó detener a Trump a toda costa” mediante la desobediencia en sus políticas y establecerse él como quien reflotó la economía luego de la crisis del coronavirus.

Ante los preocupantes índices de inflación que los Estados Unidos han tenido durante toda la administración Biden, Powell ahora busca impedir la recesión para beneficiar a Biden en las elecciones de noviembre y evitar que Trump regrese a la Casa Blanca.

En otra parte de la conversación, Hizmo aseguró que los sectores conservadores son ”estúpidos” y aseguró que no existen personas con dicha ideología en el campo de la economía, a pesar de que el propio Powell se considera un conservador.

Entre risas, el desubicado economista de la FED dijo con mucha confianza que si Trump regresa a la presidencia este año, todos los empleados de la entidad monetaria buscarán nuevamente entorpecer las políticas económicas del Ejecutivo.

Cambio climático y políticas de género

Hizmo destacó que Powell, a pesar de ser un conservador, hoy mantiene una excelente relación con Biden y con los sectores más progresistas del Partido Demócrata, y que en los últimos 3 años ha implementado cambios en favor de la promoción de políticas medioambientales, políticas de género y temáticas raciales.

Uno de los mayores cambios que Powell ha implementado en la Reserva Federal desde la llegada de Biden, ha sido la promoción de espacios dentro del banco central en el cual solo se discuten temas relacionados al cambio climático y a cuestiones de género.

Powell además se ha gastado millones en un programa a través del cual la Reserva Federal contrata a “científicos” ecologistas, especializados en género o expertos en cuestiones raciales, para que “estudien maneras de enriquecer las discusiones del directorio de la Reserva Federal“.

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