Seguinos en redes

Reino Unido

Eric Clapton anunció que no dará shows en espacios que exijan un certificado de vacunación

Publicado

en

El miembro del Salón de la Fama de la Música expresó opiniones en contra de las cuarentenas y rechazó completamente el pasaporte de vacunación que se empezó a aplicar en Inglaterra y se quiere aplicar en Estados Unidos.

La mega-estrella de rock y blues inglés, Eric Clapton, se expresó en contra de las medidas del gobierno de Boris Johnson que anunció un "pasaporte" o certificado de vacunación para que la gente entre a lugares cerrados o a eventos masivos.

En este sentido, anunció que no tocará en lugares que requiera que los asistentes demuestren haber sido vacunados contra el Covid-19. Si bien en Inglaterra esto será obligatorio, lo que significará que el virtuoso guitarrista no estará tocando en el corto plazo en su tierra natal, su anuncio también va dirigido a Estados Unidos, donde a pesar de que Biden todavía está evaluando una medida así, muchas empresas han empezado a pedir este certificado para hacer shows de música.

Clapton emitió su declaración en respuesta al anuncio del primer ministro Boris Johnson del lunes 19 de julio en el que anunció que se requerirán pases de vacunación para ingresar a cines, teatros, restaurantes, boliches y shows musicales.

Tras el anuncio del primer ministro me siento obligado a hacer mi propio anuncio, dijo Clapton. “Quiero decir que no actuaré en ningún escenario donde haya una audiencia discriminada presente. A menos que haya una disposición para que todas las personas asistan, me reservo el derecho de cancelar el espectáculo“.

La declaración de Clapton fue compartida a través de la cuenta de Telegram del productor de cine Robin Monotti. El mensaje iba acompañado de un enlace a la canción anti-confinamiento de Clapton con Van Morrison, “Stand and Deliver”.

Los próximos espectáculos programados de Clapton en el Reino Unido tenían fecha para mayo de 2022, cuando dará dos conciertos programados en el Royal Albert Hall de Londres. Además, el artista tiene un puñado de conciertos en Estados Unidos confirmados para el próximo mes de septiembre. La realización de estos eventos quedarán ligados a las medidas sanitarias que se quieran aplicar.

“Tras el anuncio del primer ministro el lunes 19 de julio de 2021, me siento obligado a hacer mi propio anuncio”, dijo Clapton
“Tras el anuncio del primer ministro, me siento obligado a hacer mi propio anuncio contra el gobierno”, dijo Clapton.

El pasado 16 de mayo, Clapton contó su “desastrosa” experiencia después de recibir la vacuna de AstraZeneca contra el coronavirus. “Tomé el primer pinchazo de AZ y enseguida tuve reacciones severas que duraron diez días. Finalmente me recuperé y me dijeron que sería doce semanas antes del segundo…”, explicó Clapton.

Aproximadamente seis semanas después me ofrecieron y tomé la segunda inyección AZ, confiando en la propaganda del gobierno. No hace falta decir que las reacciones fueron desastrosas, mis manos y pies estaban congelados, entumecidos o ardiendo, y prácticamente inútiles durante dos semanas, temí que nunca volvería a tocar", contó.

El caso de Clapton es particular: sufre de neuropatía periférica desde 2013 y, aunque nunca tuvo síntomas muy fuertes, la segunda dosis de la vacuna lo destruyó. "Nunca debí haberme dado la vacuna. Pero la propaganda del Estado decía que la vacuna era segura para todos, y mí médico me decía que no había ningún problema", confesó.

Clapton también habló sobre el descubrimiento de "héroes" como el político conservador británico anti-encierro Desmond Swayne, así como canales de YouTube de mentalidad similar.

Sigo recorriendo el camino de la rebelión pasiva y trato de seguir la línea para poder amar activamente a mi familia, pero es difícil morderme la lengua con lo que ahora sé”, dijo Clapton.

Luego me dirigieron a Van Morrison; ahí fue cuando encontré mi voz, y aunque estaba cantando sus palabras, hicieron eco en mi corazón”, aseguró el músico, quien grabó la canción que se convirtió en el himno anti-cuarentena en 2020 ‘Stand and Deliver‘, escrita por el famoso cantante autor de ‘Brown Eyed Girl’.

Reino Unido

El nuevo gobierno socialista del Reino Unido busca dejar entrar 90.000 inmigrantes ilegales que iban a ser deportados a África

Publicado

en

El Partido Laborista quiere que los trabajadores sociales de inmigración a comiencen a tramitar las solicitudes de asilo de personas que están en proceso de ser deportadas a Ruanda, después de haber ingresado ilegalmente al Reino Unido.

El gobierno socialista del Reino Unido avanzará con los planes para permitir que 90.000 inmigrantes ilegales, que de otro modo serían deportados a Ruanda, soliciten asilo en el Reino Unido.

Se espera que esta semana, la Ministra del Interior, Yvette Cooper, anuncie una legislación que autorizará a los trabajadores sociales de inmigración a iniciar el procesamiento de las solicitudes de asilo de aquellos que están en proceso de ser deportados a Ruanda tras ingresar ilegalmente al Reino Unido.

El Refugee Council, una organización con sede en el Reino Unido, estima que alrededor de 60.000 de las 90.000 personas recibirán asilo, considerando los perfiles de los países de origen de la mayoría de ellas.

No obstante, se espera que las autoridades den prioridad al 30% de solicitantes de asilo provenientes de países "seguros" como Vietnam, Albania, Egipto e India, cuyas solicitudes tienen más probabilidades de ser rechazadas y, por lo tanto, podrían ser deportados rápidamente a sus países de origen.

Actualmente, casi 36.000 inmigrantes se alojan en hoteles, lo que supone un costo para los contribuyentes de 2.900 millones de libras diarias. Cooper se ha comprometido a que dejen de usar hoteles para "empezar a ahorrar dinero de inmediato" pero, en vez de deportarlos, busca dejarlos entrar al país.

Los conservadores acusan al Partido Laborista de conceder una amnistía efectiva a los inmigrantes, mientras que el Partido Laborista alega que los conservadores han otorgado una "amnistía hotelera" al no organizar ni un solo vuelo a Ruanda y mantener a los inmigrantes en hoteles.

Se entiende que el Partido Laborista podría trasladar a los inmigrantes al sistema de asilo sin necesidad de derogar la Ley de Migración Ilegal de Rishi Sunak. Esta ley decretó que las solicitudes de cualquier inmigrante que llegara ilegalmente al Reino Unido en los últimos 18 meses serían tratadas como inadmisibles y serían deportados a Ruanda.

Sin embargo, Sunak nunca activó dos elementos clave de la ley: declarar inadmisibles sus reclamaciones y otorgar poderes para expulsarlos a Ruanda.

Esto significa que el Partido Laborista podría dejar la ley "congelada " y no necesitaría pasar por el largo proceso de derogarla en el Parlamento antes de procesar las reclamaciones.

Keir Starmer, el socialista y Primer Ministro del Reino Unido, prometió "arreglar el roto sistema de asilo" eliminando los atrasos en materia de asilo y eliminando el "increíblemente costoso" plan de Ruanda.

Un nuevo Comando de Seguridad Fronteriza será financiado eliminando el plan de Ruanda, ahorrando 100 millones de libras en pagos futuros y "decenas de millones de libras" que se habrían pagado por los inmigrantes reubicados.

Hasta ahora, Ruanda ha recibido 290 millones de libras en virtud del acuerdo supervisado por Boris Johnson, y solo cuatro solicitantes de asilo rechazados han sido transferidos voluntariamente al estado africano.


Seguir Leyendo

Reino Unido

Noel Gallagher dijo lo que todos pensamos sobre el público “woke” en Glastonbury: “Pequeños idiotas agitando banderas”

Publicado

en

El ex integrante de Oasis criticó severamente la politización del Festival de Glastonbury, describiéndolo como "demasiado progresista".

Noel Gallagher, cofundador de Oasis junto a su hermano Liam, criticó abiertamente el Festival de Glastonbury en una entrevista con el diario The Sun, describiéndolo como "demasiado woke".

El músico, quien se presentó en el festival este año y debutó como solista en 2022, manifestó su desagrado por las demostraciones políticas en los conciertos, considerándolas “un poco predicadoras y con cierta señalización de virtud”.

Gallagher expresó su molestia por la inclusión de mensajes políticos en la música, diciendo: “(La política) no me gusta en la música, pequeños idiotas agitando banderas y haciendo declaraciones políticas”.

Instó a los artistas a centrarse en su música y evitar las proclamas políticas. A pesar de sus críticas, Noel Gallagher elogió el festival, destacando que es “probablemente lo mejor de Gran Bretaña aparte de la Premier League”.

“Es demasiado, me parece que es un exceso. Donen todo su dinero a la causa y ya está. Dejen de parlotear“, sumó criticando a sus colegas que se expresaron, por ejemplo, en torno al conflicto de Israel y Palestina. “Todo el mundo sabe lo que está pasando en el mundo, tienen un teléfono en el bolsillo que te lo dice“, agregó, dejando en claro que no le parece necesario que los artistas se pronuncien políticamente durante el show.

En la misma entrevista con el tabloide británico, también dirigió sus críticas a Dave Grohl de Foo Fighters, quien expresó su deseo de una reunión de Oasis. En ese sentido, pidió a Grohl que “dejara de meterse” en los asuntos de la banda.

Saber que están ahí fuera, en alguna parte, pero que no se reúnen para hacer lo que a todo el mundo le gustaría tanto. Estoy como: ustedes [son] imbéciles”, dijo Grohl sobre los hermanos Gallagher.

Este año, Glastonbury fue escenario de varias expresiones políticas. Uno de los actos más significativos fue realizado por Banksy, quien lanzó una balsa inflable con maniquíes de migrantes durante los espectáculos de Idles y Little Simz, como crítica a la política de inmigración del gobierno británico.

En respuesta, el ministro del Interior, James Cleverly, calificó la acción de “vil e inaceptable”. Banksy defendió su performance y criticó la detención de un barco de rescate real por parte de las autoridades italianas.

Además de Banksy, otros artistas también hicieron declaraciones políticas durante el festival. La banda Idles lideró un canto en contra de la monarquía, mientras que Damon Albarn de Blur cuestionó al público sobre el conflicto palestino-israelí y criticó el liderazgo de “octogenarios” en referencia a la próxima contienda electoral estadounidense.

El Festival de Glastonbury siempre ha mantenido una estrecha relación con causas políticas, principalmente ambientales. La organización Greenpeace tiene una presencia significativa cada año, y el escenario Left Field, curado por Billy Bragg, alberga debates sobre temas actuales.

Desde 1981, el evento musical colabora con la Campaña para el Desarme Nuclear (CND), una organización a la cual el organizador Michael Eavis atribuye gran parte del éxito inicial del festival.

Conocido por su larga tradición de apoyo a causas políticas de izquierda, el Festival de Glastonbury sigue siendo un punto de encuentro para los militantes de izquierda y su "expresión artística". La integración de estos elementos genera tanto apoyo como controversia, reflejando las tensiones más amplias en la sociedad británica.

Seguir Leyendo

Reino Unido

En su primera semana como Primer Ministro, el socialista Keir Starmer anunció la estatización de los trenes en el Reino Unido

Publicado

en

La recién designada secretaria de Transporte, Louise Haigh, y el nuevo Primer Ministro del Partido Laborista, presentaron un plan para nacionalizar los ferrocarriles en los próximos cinco años.

El Partido Laborista ha revelado planes para nacionalizar la red ferroviaria inglesa, integrándola gradualmente en una empresa pública denominada Great British Railways, a medida que se vayan renovando los contratos. La idea del partido es "recuperar" los ferrocarriles sin incurrir en grandes gastos de indemnización.

En una entrevista reciente, Louise Haigh, secretaria de Transporte en la sombra del Partido Laborista, afirmó que: "Haremos que los operadores privados restantes vuelvan a ser de propiedad pública". Esto ocurro 30 años después de la privatización realizada por el gobierno de John Major. "Todos ellos expirarán durante el primer mandato de un gobierno laborista, ya sea en su contrato completo o en su contrato básico.", afirmó la secretaria.

Aunque esta decisión política no es una sorpresa, ha dividido al partido en el pasado. En 2022, Rachel Reeves retiró la nacionalización cuando anunció sus reglas fiscales. En ese momento, había dicho que "no había dinero para una nacionalización masiva", lo que ocasionó una división interna. El partido aclaró rápidamente que su ministra de Hacienda quería decir que, si bien se aplicarían las reglas fiscales, hay un "papel positivo para el ferrocarril en la propiedad pública". Ese compromiso es lo que vemos hoy.

La red ferroviaria británica fue nacionalizada por primera vez por el primer ministro laborista Clement Attlee en 1948 y luego privatizada nuevamente bajo el gobierno conservador de John Major en 1993.

Network Rail, responsable de la infraestructura ferroviaria en Inglaterra, Escocia y Gales, es de propiedad pública. Sin embargo, los servicios de trenes y la gestión de la mayoría de las estaciones más pequeñas están divididos en franquicias operadas por diferentes empresas privadas.

La pandemia ha tenido un impacto significativo en la financiación de los ferrocarriles, ya que la drástica caída en el número de pasajeros ha afectado severamente a la mayoría de las empresas operadoras.

En septiembre de 2020, se eliminó el sistema de franquicias que había sido creado durante la privatización en la década de 1990. Bajo las franquicias, los operadores privados retenían los ingresos por tarifas. En la actualidad, la industria ferroviaria se gestiona a través de contratos de gestión, donde el gobierno retiene todas las tarifas.

Además, cinco líneas están efectivamente bajo control gubernamental a través del esquema de "operador de último recurso", lo que equivale a una forma de nacionalización.

Aunque la Ley de Ferrocarriles de 1993 inicialmente prohibía la gestión estatal de los ferrocarriles en el Reino Unido, varias empresas estatales extranjeras de países como los Países Bajos, Alemania, Francia, Italia y Hong Kong ahora gestionan franquicias ferroviarias en el país.

El gobierno laborista esperaría transferir las 10 redes ferroviarias privadas restantes a propiedad pública "dentro del primer mandato", fusionando los contratos ferroviarios de pasajeros privados existentes en un nuevo organismo a medida que expiren.

Louise Haigh, secretaria de Transporte en la sombra, trató de justificar está autoritaria decisión diciendo que, bajo este plan, el contribuyente podría "ahorrar" unos supuestos £2.2 mil millones al año, aunque reconoció que aún no tenía el compromiso de la ministra de Hacienda en la sombra, Rachel Reeves, de reinvertir todos esos ahorros en los ferrocarriles.

Estableceremos Great British Railways: una mente única y rectora que controle nuestros ferrocarriles en beneficio de los pasajeros”, declaró Haigh. “Aunque sí, vamos a conservar el nombre. Lamento decir que mi sugerencia de ‘Rail Britannia’ no fue aceptada”.

Seguir Leyendo

Tendencias