Seguinos en redes

África

Italia y Libia reanudan los vuelos comerciales tras 10 años: Se había cortado por la Guerra Civil

Publicado

en

Un vuelo MT522, operado por la aerolínea libia Medsky Airways, partió del Aeropuerto Internacional de Mitiga en Trípoli hacia el Aeropuerto Leonardo da Vinci-Fiumicino de Roma. Un vuelo de regreso estaba programado para aterrizar en Trípoli el sábado por la tarde.

Italia y Libia, país devastado por la guerra, reanudaron el sábado los vuelos comerciales por primera vez en una década, confirmaron las autoridades de la capital libia. Habrá un vuelo de ida y vuelta entre las capitales libia e italiana los sábados y miércoles, según el anuncio del aeropuerto de Mitiga.

El vuelo MT522, operado por la aerolínea libia Medsky Airways, partió del Aeropuerto Internacional de Mitiga en Trípoli hacia el Aeropuerto Leonardo da Vinci-Fiumicino de Roma. Un vuelo de regreso estaba programado para aterrizar en Trípoli el sábado por la tarde, según el Aeropuerto Internacional de Mitiga.

El gobierno del primer ministro Abdul-Hamid Dbeibah en Trípoli elogió la reanudación de los vuelos, teniendo en cuenta que Italia y otras naciones occidentales prohibieron los vuelos desde el país norafricano en un contexto en el que Libia se sumió en levantamientos populares en el marco de la Primavera Árabe en 2011, lo cual dio pie a una intervención militar de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) que acabó con la vida del dictador Muammar Gadafi.

En este tiempo, Libia sólo ha tenido vuelos directos a destinos limitados, incluidas ciudades en Egipto, Túnez y Jordania.

Todo terminaría en una guerra civil entre el Este y el Oeste del país que, en uno u otro sentido, continúa hoy en día. Cada bando está respaldado por milicias armadas y gobiernos extranjeros. Desde entonces, Libia está dividida entre dos gobiernos rivales.

Uno de ellos tiene su sede en el este del país y está respaldado por Khalifa Haftar. En el oeste, el gobierno liderado por el empresario Abdel Hamid Dbeibah se estableció en 2021 bajo un acuerdo mediado por las Naciones Unidas (ONU).

Visita de Giorgia Meloni, primera ministra italiana, a Libia

Esta última administración debió celebrar elecciones presidenciales y legislativas, supuestamente para reunir a todas las instituciones libias, que han estado divididas desde la caída de Gadafi en octubre de 2011. Aunque planeadas para diciembre de 2021 y enero de 2022, las elecciones se retrasaron indefinidamente debido a los desacuerdos entre las facciones occidental y oriental.

En este contexto, en marzo de 2022, el parlamento con sede en el este de Libia nombró a un nuevo gobierno y un nuevo primer ministro, Fathi Bashagha, quien posteriormente fue suspendido de su cargo en mayo de 2023. Así las cosas, el país sigue estancado.

Se supone que una nueva iniciativa de la ONU permitirá la celebración de elecciones simultáneas antes de finales de 2023. Sin embargo, Jalel Harchaoui, investigador de RUSI, un think tank británico especializado en defensa y seguridad, advierte que las elecciones podrían retrasarse por la tragedia en Derna, al este del país.

El paso de la Tormenta Daniel, la cual generó una serie de inundaciones en el este de Libia, ha hecho aún más compleja la vida diaria de los civiles libios y ha provocado grandes cuestionamientos sobre la infraestructura del país devastado por la guerra.

Las represas en Derna, en el este de Libia, no se han mantenido durante más de dos décadas, ha afirmado Ahmed Madroud, vicealcalde de la ciudad; quien también agregó que la destrucción de la tormenta Daniel en Derna será difícil de reparar.

La tormenta Daniel “es ilustrativa del tipo de inundación devastadora que podemos esperar cada vez más en el futuro” a medida que el mundo se calienta, dijo Lizzie Kendon, profesora de ciencias del clima en la Universidad de Bristol.

Tormenta Daniel, Libia

El servicio de monitoreo climático de la Unión Europea, Copernicus, aseguró que el aumento de las temperaturas globales de la superficie del mar estaba impulsando niveles récord de calor en todo el mundo.

África

En medio de una guerra civil contra un grupo terrorista islámico, Somalia se adhiere a la Comunidad de África Oriental

Publicado

en

Tras más de una década de intentos fallidos, Somalia se une a la Comunidad de África Oriental en medio de su lucha interna contra al-Shabab, vinculado a al-Qaeda.

Somalia se unió oficialmente a la Comunidad de África Oriental (CAO) el viernes, según anunció la organización regional que anhela a convertirse en un mercado único. “Somalia se une oficialmente a la Comunidad de África Oriental, reforzando los lazos y abriendo nuevas puertas para el progreso y la asociación“, publicó en X Daud Aweis, ministro de Información, Cultura y Turismo de Somalia.

De esta manera, Somalia ha sido admitida como el octavo miembro de la comunidad regional, poco más de un año después de la admisión de la República Democrática del Congo (RDC) al bloque. Además de los dos países mencionados, forman parte de la CAO Burundi, Kenia, Ruanda, Tanzania, Sudán del Sur y Uganda, completando así los ocho miembros. 

La admisión de Somalia en el bloque fue aprobada por los líderes de la región durante la 23ª cumbre ordinaria de jefes de Estado de la CAO celebrada en Arusha tras unas serie de negociaciones que duraron alrededor de un año.

Los países miembros han “decidido admitir a la República Federal de Somalia en virtud del tratado de adhesión” tras una reunión a puertas cerradas que duró más de cinco horas, declaró el jefe de Estado de Burundi y presidente saliente de la CAO, Évariste Ndayishimiye.

El anuncio se hizo desde Arusha en presencia del presidente de Somalia, Hassan Cheikh Mohamoud, quien expresó su “profunda gratitud”. “Este momento no es solo la culminación de una aspiración, sino un rayo de esperanza para un futuro lleno de posibilidades y oportunidades“, afirmó el mandatario somalí.

Será más sencillo para la gran diáspora somalí que vive en África Oriental acceder a servicios y productos financieros“, dijo Shuayb Haji Nur Mohamed, director gerente del Salaam Somali Bank, uno de los principales bancos del país africano.

Hassan Cheikh Mohamoud, presidente de Somalia

La entrada de Somalia en la CAO es un “paso decisivo en la expansión del bloque en África Oriental“, señalaron desde el Heritage Institute for Policy Studies, un think tank con sede en Mogadiscio, aunque también resaltaron que “el pobre historial de Somalia en materia de gobernanza, derechos humanos y Estado de derecho” podría obstaculizar su integración en el bloque regional.

El país del este africano se ha visto envuelto en disputas con sus vecinos, fundamentalmente con Etiopía, Yibuti y Kenia, algunas de las cuales han culminado en la ruptura de las relaciones diplomáticas. Sin embargo, en los últimos años, el gobierno con sede en Mogadiscio ha tomado medidas para reparar los lazos regionales, y su ingreso a la CAO debe entenderse como un paso más en la cooperación regional.

Recordemos que el gobierno somalí, apoyado por la comunidad internacional, ha estado luchando contra la insurgencia del grupo islamista al-Shabab, un grupo afiliado a al-Qaeda, durante más de 16 años.

Kenia y Uganda son dos de los países que están contribuyendo con tropas a una fuerza regional de la Unión Africana, que fue desplegada por primera vez en Somalia en 2007 para aplastar a al-Shabab. En noviembre del año pasado, la CAO también envió tropas al este de la RDC tras el resurgimiento del grupo rebelde M23.

Cabe resaltarse que Kenia pospuso a principios de este año un plan de reapertura de su frontera con Somalia tras más de una década de cierre producto del aumento de los ataques en el norte de Kenia, presuntamente, por parte de combatientes de al-Shabab.

Somalia expresó por primera vez su interés en unirse a la CAO en 2012, pero su solicitud fue rechazada debido a sus problemas internos con al-Shabab y a la falta de un entorno jurídico y político estable en aquel entonces. 

Sin embargo, las esperanzas de Mogadiscio de unirse al bloque regional se reavivaron cuando Sudán del Sur, que también enfrentaba problemas internos, fue admitido en 2016, y la República Democrática del Congo, país con múltiples conflictos dentro de sus fronteras, fue aceptada en 2022.

Con el regreso del presidente Mohamud, que había iniciado el primer intento de adhesión a la CAO durante su primer mandato en 2012, Somalia renovó su candidatura para unirse al bloque y, en enero de este año, se envió una misión de verificación para confirmar su disposición a unirse al bloque.

En agosto, los funcionarios somalíes entablaron negociaciones con funcionarios de la CAO, tras lo cual se redactó un informe que se remitió al Consejo de Ministros de la CAO para su discusión, antes de remitir a la cumbre de jefes de Estado, celebrada este viernes.

De esta manera, es pertinente señalar que es probable que la entrada de Somalia en la CAO allane el camino para la admisión de sus vecinos, Eritrea y Djibouti, que también han estado buscando unirse a la CAO y así integrar a todo el Cuerno de África en el bloque de África del Este.

Miembros de la Comunidad Africana Oriental previo a la adhesión de Somalia. Fuente: East African Community (EAC)

Fundada en el año 2000, uno de los objetivos de la CAO es facilitar el comercio transfronterizo mediante la supresión de los derechos de aduana entre sus Estados miembros. Posteriormente, en 2010, la CAO estableció un mercado común.

Excluyendo Somalia, los países de la CAO cubren un área de 4,8 millones de kilómetros cuadrados y tienen un producto interno bruto combinado de 305.000 millones de dólares, según el sitio web de la organización, que también resalta el hecho de que el comercio total de la CAO en 2022 fue de 78.750 millones de dólares.

Con una población de unos 17 millones de habitantes, Somalia tiene la costa más larga del continente africano-más de 3.000 km-, que además tiene potencial de explotación de petróleo y gas en su Mar Territorial y su Zona Económica Exclusiva, lo que eleva el mercado potencial de la CAO.

Aunque la CAO ha avanzado a lo largo de las décadas en la integración económica, al igual que muchos otros bloques comerciales, ha tenido dificultades para superar ciertas barreras al comercio, como la excesiva burocracia, la inestabilidad política, la infraestructura deficiente y las disputas comerciales.

Seguir Leyendo

Sudán

Continúa la Guerra Civil en Sudán y el líder del Ejército pide nombrar a las FAR como organización terrorista

Publicado

en

El líder del Ejército de Sudán expresó que las conversaciones de paz con el jefe de las Fuerzas de Apoyo Rápido son imposibles y pidió que el grupo sea nombrado una organización “terrorista”.

A medida que el conflicto de guerra civil en Sudán se acerca a los seis meses, el jefe del Ejército de Sudán, y líder de facto del país, el general Abdel Fattah al-Burhan, ha admitido que los combates podrían conducir a un desastre humanitario más amplio en la región.

El jefe del Ejército advirtió durante la 78° Asamblea General de las Naciones Unidas, además, pidió tanto que se ejerza presión internacional sobre las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), grupo paramilitar contra las que está luchando, incluida su designación como “terroristas”, como que se ataque a sus patrocinadores fuera de las fronteras de Sudán, una alusión a los vínculos con el Grupo Wagner.

El peligro de esta guerra es ahora una amenaza para la paz y la seguridad regionales e internacionales, ya que esos rebeldes han buscado el apoyo de forajidos y grupos terroristas de diferentes países de la región y del mundo“, sentenció Burhan.

La interferencia regional e internacional para apoyar a estos grupos ya es muy clara. Esto significa que esta es la primera chispa que quemará la región y tendrá un impacto directo en la paz y la seguridad regionales e internacionales“, agregó.

El conflicto entre el Ejército y las Fuerzas de Apoyo Rápido, dirigidas por el ex adjunto de Burhan, el general Mohamed Hamdan Dagalo, conocido como Hemedti, estalló el pasado 15 de abril después del colapso de un plan para integrar al grupo paramilitar con el Ejército. Esto ocurre cuatro años después de que el ex dictador Omar al-Bashir fuera depuesto en un levantamiento popular.

Conflicto armado en Sudán

Ambas partes se han echado culpas por iniciar el conflicto que comenzó en la capital del país, Jartum, y que se ha extendido a otras partes del territorio nacional, acabando con la vida de, al menos, 7.500 personas, según cifras oficiales, y desplazando a más de cinco millones de personas.

Con respecto a la designación como organización terrorista, Burhan dijo, refiriéndose a las FAR, que “han cometido todo tipo de crímenes que dan lugar a tal designación“; y agregó que “el asesinato, la quema, la violación, el desplazamiento forzado, el saqueo, el robo, la tortura, el tráfico de armas y drogas, la llegada de mercenarios o el reclutamiento de niños, todos estos crímenes requieren rendición de cuentas y castigo”.

Luego, durante una entrevista con Al Jazeera en Nueva York, Burhan dijo que “lo que las Fuerzas de Apoyo Rápido han hecho al pueblo sudanés una y otra vez los califica como terroristas y deben ser castigados. Lo que esas pandillas cometieron es, de hecho, un crimen de lesa humanidad. Y creo que clasificarlos como una organización terrorista limitará su poder y limitará la simpatía por ellos“.

En un video publicado el jueves, poco antes de que Burhan hablara en las Naciones Unidas, Hemedti dijo que sus fuerzas estaban completamente preparadas para un alto el fuego y para llevar a cabo conversaciones políticas integrales para poner fin al conflicto.

Hoy, renovamos nuestro compromiso con el proceso pacífico para poner fin a esta guerra“, dijo Hemedti. “Las FAR están totalmente preparadas para un alto el fuego en todo Sudán para permitir el paso de la ayuda humanitaria (…) y para iniciar conversaciones políticas serias e integrales“, dijo.

Emigración de Sudán hacia países vecinos producto del conflicto

Sin embargo, cuando Al Jazeera le preguntó a Burhan si creía que la negociación con el líder de las FAR todavía era posible, el líder del ejército dijo que “no es posible, para ser honesto“. Cabe recordar que las conversaciones para poner fin al conflicto no han prosperado, y ambas partes se acusan mutuamente de violar los requisitos necesarios para un alto al fuego.

Junto con el líder de las FAR, Burhan tiró abajo en 2021 al liderazgo civil que había sido parte de un acuerdo de transición para compartir el poder tras las protestas masivas que derrocaron al líder Omar al-Bashir.

Con relación a ello, Burhan afirmó el jueves que estaba “comprometido con nuestras promesas anteriores de transferir el poder al pueblo de Sudán con un gran consenso y consentimiento nacional“. “Las Fuerzas Armadas abandonarían la política de una vez por todas”, añadió.

Seguir Leyendo

Gabón

Golpe de Estado militar en Gabón: Ya son siete los países africanos que caen en manos de una Junta Militar prorrusa

Publicado

en

Los golpistas de Gabón nombraron al general Brice Oligui Nguema como nuevo líder de la Junta Militar, completando la cortina de hierro que complica a la ECOWAS (Comunidad Económica de Estados de África Occidental), aliada a Francia.

Este 30 de agosto en Gabón, un petroestado de 2,4 millones de habitantes en África central, un grupo de militares convirtieron a su país en la séptima nación africana que cae en manos de una Junta Militar vinculada a Rusia, sacando del poder a un presidente democráticamente electo aliado de Occidente.

Los uniformados liderados por el general Brice Oligui Nguema, anunciaron en la televisión estatal que se habían apoderado de su país, derrocando al presidente Ali Bongo. Tras la cadena nacional, el general Nguema fue llevado triunfalmente por sus tropas por las calles de la capital, Libreville.

La antigua colonia francesa miembro de la Unión Africana, es uno de los principales productores de petróleo de África, y que ahora pase a la esfera de influencia de Rusia tiene un impacto fuertísimo en la geopolítica de la región.

Rusia está jugando fuerte en la región de África Occidental y Central a través del Grupo Wagner, cuyos mercenarios rusos están asesorando a distintos grupos militares para deponer a los mandatarios aliados de Francia y cambiar completamente la alineación de sus países.

Se ve que el modelo de golpe de Estado que crearon los asesores de Wagner es extremadamente efectivo, y ya han colocado a siete jefes militares en África desde que comenzó la guerra en Ucrania.

El golpe militar en Gabón se suma a una larga serie de golpes de Estado promovidos por Rusia. Desde 2020 a la fecha, otros seis países han caído recientemente bajo control de militares pro-rusos. Recientemente hubo un golpe de Estado en Níger, antes hubo dos golpes de Estado en Malí, además de otros dos en Burkina Faso, uno en Chad, otro en Guinea y otro en Sudán.

En Níger, el presidente Mohamed Bazoum fue destituido del poder cuando los guardias presidenciales, encabezados por el general Omar Tchiani, lo arrestaron y tomaron control del país. En su discurso, el jefe militar le agradeció a Rusia e incluso los manifestantes en favor del nuevo régimen celebraron con banderas rusas en las calles.

En Malí, el general Assimi Goita tomó el control del país en julio del 2020 y luego en mayo del 2021 volvió a hacer un golpe para sacar al presidente de transición que él mismo había puesto. En Chad, en abril del 2021, tras la muerte de Idriss Déby, el Ejército tomó control del país y colocó a su hijo, Mahamat Déby, como presidente de facto.

Por su parte, en Guinea, el comandante de las Fuerzas Especiales, el coronel Mamady Doumbouya, derrocó al presidente Alpha Conde en septiembre de 2021. Un año antes, Conde había cambiado la constitución para eludir los límites que le habrían impedido presentarse a un tercer mandato, lo que provocó disturbios generalizados y llevó al ascenso de los militares.

En octubre del 2021, el general Abdel Fattah al-Burhan tomó control del poder a través de un nuevo golpe de Estado contra el Gobierno de Transición Militar, eliminando a la facción pro-EEUU de la coalición militar que venía gobernando el país desde 2019. Actualmente, Sudán se encuentra en una brutal guerra civil por el control del poder.

En Burkina Faso, en enero del 2022, el teniente coronel Paul-Henri Damiba dio un golpe de Estado y se instaló como presidente de facto, pero fue destituido unos meses después, en octubre de ese año, por el capitán Ibrahim Traoré.

En todos los casos, estos países africanos con enorme influencia francesa tenían gobiernos democráticos alineados con Estados Unidos y Europa, pero los golpes militares pro-rusos han creado una suerte de cortina de hierro en contra de la OTAN en África central.

El Grupo Wagner, especialista en golpes de Estado, recientemente perdió a su máximo líder, Yevgueny Prigozhin, que probablemente fue asesinado por Vladimir Putin luego de que intentara hacer un golpe de Estado en su contra en Rusia.

La gran parte de los mercenarios del grupo fueron absorbidos por el Ejército ruso, pero las tropas más especializadas de Wagner continúan operando en África, luego de retirarse de Ucrania, donde están derrocando gobierno tras gobierno para ponerlos bajo la esfera de influencia de Moscú.

Tras el anuncio, la Unión Africana suspendió la participación de Gabón en todas sus actividades tras la toma militar del miércoles, que condenó enérgicamente. El derrocamiento del presidente Ali Bongo puso fin a 55 años de control del poder de su familia en el estado centroafricano.

Oficiales del Ejército aparecieron en televisión en las primeras horas del miércoles para decir que habían tomado el poder, y anunciaron que habían anulado los resultados de las elecciones del pasado sábado en las que Bongo fue declarado ganador pero que la oposición consideró fraudulentas.

En cuestión de horas, los generales se reunieron para discutir quién lideraría la transición y acordaron por votación unánime nombrar al general Nguema, ex jefe de la guardia presidencial, en un modus operandi idéntico al de Níger.

El general Nguema dijo al periódico francés Le Monde que el pueblo gabonés estaba harto del gobierno de Ali Bongo y que no debería haberse podido presentar a un tercer mandato consecutivo. “Todo el mundo habla de esto pero nadie se hace responsable“, afirmó. “Hablan de democracia pero Bongo no se iba a ir nunca más“.

Ali Bongo, uno de los aliados más fuertes del gobierno francés en el centro de África, fue declarado ganador de las disputadas elecciones del sábado, luego de completar dos mandatos que comenzó en 2009. Antes de eso, su padre Omar Bongo, estuvo en el poder durante 41 años.

De hecho, el propio general Nguema comenzó su carrera político-militar como ayudante de campo del ex presidente, y los medios locales indican que había sido muy cercano a Omar Bongo, atendiéndolo desde 2005 hasta su muerte en un hospital español.

En 2018, fue el propio Ali Bongo quien lo nombró como jefe de inteligencia de la guardia republicana de élite, la unidad militar más poderosa de Gabón, en sustitución del medio hermano de Ali Bongo, Frederic Bongo, con quien se estaban disputando el poder. En 2021, fue ascendido a general.

General Nguema es alzado por los golpistas.

Seguir Leyendo

Tendencias