Crawling peg: los datos que mira el Gobierno para decidir la baja al 1%
El Banco Central podría reducir el ritmo de ajuste mensual del dólar oficial al 1% en el primer trimestre del 2025.
En los próximos días, el Gobierno enfrentará la llegada de tres indicadores decisivos que delinearán el cierre del primer año del plan económico y anticiparán el ritmo de las próximas medidas, incluida la esperada reducción de la devaluación mensual del tipo de cambio oficial al 1%.
La baja del crawling peg es fundamental para que se consoliden las expectativas inflacionarias a la baja en los próximos meses. La medida apuntaría a romper la barrera inflacionaria del 2% mensual autoinducido por el Banco Central.
Inflación mayorista: el primer indicador
El lunes se publicará el Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM), un dato que el Gobierno ha comenzado a priorizar para medir la velocidad del movimiento de los bienes, especialmente los importados, y su impacto en los costos de producción. En octubre, el indicador mostró un alza del 1,2%, mientras que las estimaciones para noviembre lo sitúan en torno al 1,6%.
“La reducción del ritmo de devaluación mensual del dólar oficial, sumada a una brecha cambiaria más controlada, ha moderado los aumentos en los precios mayoristas, tanto por efecto directo en los bienes importados como en los nacionales con componentes importados”, señaló un informe de la consultora LCG.
Cuentas fiscales: el superávit en la mira
El miércoles será el turno de los resultados fiscales de noviembre. Este dato permitirá evaluar el margen de superávit primario antes de que en diciembre, como es habitual, se incremente el gasto público debido al pago de aguinaldos y el cierre de las ejecuciones presupuestarias.
Según datos preliminares, el ritmo del ajuste del gasto en noviembre fue menos pronunciado que en meses anteriores. Un informe de la consultora Analytica destacó que el recorte interanual fue del 19% en términos reales, marcando una desaceleración respecto al ajuste más severo registrado en marzo (-39%).
Por su parte, LCG proyectó un superávit primario cercano a $1,9 billones (0,1% del PBI), impulsado por ingresos creciendo al 160% anual y gastos al 115%. Este resultado positivo se mantendría incluso al sumar los intereses de deuda, aunque con menor margen debido al pago de USD 750 millones al FMI durante el mes.
Balanza comercial: una señal para las reservas
El saldo de la balanza comercial de noviembre, otro indicador crucial, se espera positivo, aunque menor al promedio mensual de USD 1.600 millones registrado hasta octubre. Consultoras anticipan un superávit en torno a los USD 600 millones, lo que podría encender alarmas sobre un posible atraso cambiario que impacte en el ingreso de divisas y favorezca el crecimiento de las importaciones.
Una mirada hacia 2025: ¿un dólar más estable?
El IPC de noviembre dejó abiertas las puertas para que el Banco Central reduzca el ritmo de ajuste mensual del dólar oficial al 1% en el primer trimestre de 2025, como confirmó el ministro de Economía, Luis Caputo.
No obstante, el Gobierno enfatiza que, para eliminar el cepo cambiario, es crucial seguir recomponiendo las reservas internacionales a través de un nuevo acuerdo con el FMI y financiamiento privado en dólares.
El presidente Javier Milei destacó la relevancia de este proceso: “La convergencia del tipo de cambio paralelo con el oficial es inédita en la historia. Este avance nos acerca a la eliminación definitiva del cepo cambiario, una aberración que no debería haber existido y que desaparecerá el año que viene”.
Con estas medidas, el Gobierno busca consolidar un camino hacia un mercado cambiario libre, apoyado en un equilibrio fiscal sostenible y un tipo de cambio competitivo.
Más noticias: