Axel Kicillof le pagó $8 millones mensuales a los hijos del mercenario Roberto Navarro
El Gobernador bonaerense utilizó fondos del Estado para financiar “Producciones La Ñata”, perteneciente a los Navarro.
En 2022, el gobernador ultra kirchnerista de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, asignó aproximadamente 8 millones de pesos en Pauta Oficial a la productora perteneciente a los hijos de Roberto Navarro, un mercenario, ensobrado y empresario de la propaganda, cercano al kirchnerismo, que fue repetidamente beneficiado por su militancia política a lo largo de los años.
La productora en cuestión, "Producciones La Ñata", fue propiedad del propio Roberto Navarro hasta principios de 2021. Sin embargo, tras varias controversias sobre adjudicaciones de contratos millonarios y balances económicos que no cuadraban con el número de empleados que reportaba la empresa, Navarro decidió renunciar a su cargo como director y transferir la titularidad de la productora a sus hijos, Florencia y Nicolás. Lejos de desentenderse por completo, el periodista, y ahora con sus hijos, continuó siendo beneficiado de forma indirecta por los ingresos provenientes de la pauta oficial otorgada a la productora.
Es importante destacar que la relación de la familia Navarro con el Estado no se limitó a un vínculo estrictamente empresarial. Se denunció qué, a lo largo de los años, la productora y los medios vinculados a Navarro fueron "generosamente recompensados" con cuantiosas sumas de dinero provenientes del Estado. La familia de Navarro aprovechó su cercanía con el poder político kirchnerista, beneficiándose del uso discrecional de los recursos públicos, en detrimento de las necesidades más urgentes del país.
La opulencia de la familia Navarro también es un punto que genera controversia. Florencia y Nicolás, a quienes Roberto Navarro les transfirió la titularidad de la productora, disfrutan de un estilo de vida lujoso que contrasta con las dificultades económicas que atraviesan millones de argentinos. Este hecho remarca la obtención, desde el Estado, de beneficios económicos desmedidos a costa del dinero de los contribuyentes.
En aquella época, se reportó que Roberto Navarro compró un BMW 220i valuado en más de 30 mil dólares, además de ser propietario de un exclusivo departamento de 1,2 millones de dólares en avenida Libertador, una de las zonas más caras de Buenos Aires. Sus hijos tampoco se quedan atrás en cuanto a bienes de lujo: Florencia tiene su nombre tres automóviles, incluyendo un Citroën C3 y un Peugeot 308, mientras enfrenta deudas con la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) y juicios de la AFIP por evasión fiscal. Por su parte, Nicolás, igualmente inmerso en el lujo, posee dos vehículos Audi A4.
El problema no radica únicamente en los bienes materiales de la familia Navarro, sino en la falta de transparencia y las adjudicaciones millonarias que su empresa recibió de manera constante. "El Destape Radio" (FM 107.3) y "El Destape Web", los dos medios más destacados de Roberto Navarro, recibieron durante el año pasado 2.700 millones de pesos de pauta. Esta enorme suma de dinero, proveniente de las arcas públicas, deja en evidencia los lazos políticos de Navarro, que le permitieron acceder a recursos estatales de manera indiscriminada.
La historia de la familia Navarro es una muestra de cómo la cercanía con el poder puede traducirse en grandes beneficios económicos. La acumulación de propiedades, vehículos de lujo y sueldos elevados, todo mientras reciben millonarias sumas de pauta oficial, refleja una utilización cuestionable del dinero público en un país donde la crisis económica kirchnerista obligó a muchas familias a recortar gastos en áreas fundamentales.
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