Orsi acomodó a cientos de frenteamplistas en Canelones
Convirtió la intendencia en una guarida de acomodos
Yamandú Orsi fue intendente de Canelones entre 2015 y 2014. Antes, entre 2005 y 2015, había sido secretario general, el segundo cargo más importante. En total 20 años en la intendencia de Canelones, la segunda en importancia de Uruguay. En ese periodo convirtió la intendencia en una guarida de acomodos.
Primero, como secretario general, hizo entrar a la intendencia a decenas de dirigentes del Frente Amplio que no habían tenido un cargo en el gobierno nacional del presidente Tabaré Vázquez. Políticos de mala muerte que no consiguieron un cargo en el gobierno nacional, fueron acomodados en la intendencia.
Le inventó puestos políticos pagos con salarios altísimos y privilegios, como coches con chofer, oficinas cómodas con secretaria, y altos viáticos, a muchísimos dirigentes del Frente Amplio. Incluso políticos que no vivían en Canelones ligaron un puesto en la intendencia.
En 2015 asume como intendente, y continuó con la misma política de clientelismo y repartija de cargos para militantes y amigos. Mientras el departamento de Canelones se un hundía en la pobreza, él repartía cargos políticos. Decía que no había recursos para limpiar las plazas ni para arreglar las calles, pero cuando había que acomodar a un político amigo con un alto sueldo, siempre aparecían los recursos.
La tarea fundamental de la intendencia es reparar las calles, mantener las plazas limpias, iluminar la vía pública, recolectar los residuos, y tener un sistema de gestión ágil para los trámites, entre otras cosas. Orsi hizo todo lo contrario.
Las ciudades de Canelones son una mugre, las plazas están sucias, y las calles están llenas de pozos. Mientras decía que no tenía dinero para hacer obras para los vecinos del departamento, acomodaba a cientos de militantes del Frente Amplio.
Inventó cargos de confianza para repartir entre sus correligionarios, todo pago por los contribuyentes. Todo pago con impuestos. En lugar de usar los impuestos para hacer obras para la población, los usó para acomodar a militantes y para agrandar el gasto político. Basta recorrer las calles de localidades como Solymar, Pando, Las Piedras o La Paz, para ver el estado de abandono. Mugre, cloacas tapadas, calles rotas, y plazas mugrientas.
Este hombre quiere ser presidente de Uruguay y no supo gobernar un departamento. Si en un departamento como Canelones lo único que hizo fue repartir cargos políticos para sus correligionarios, si llega a ser presidente hará exactamente lo mismo pero multiplicado por mil. Orsi es el clásico político malgastador, irresponsable, y adicto a la corrupción política.
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