
Más de 50 países negocian con Donald Trump para eliminar todos los aranceles
Una gran cantidad de países busca eliminar los aranceles contra Estados Unidos e ir al libre comercio.
Más de 50 países afectados por la política de aranceles recíprocos impulsada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se comunicaron con las autoridades norteamericanas para entablar negociaciones con el objetivo de eliminar todas las tarifas e ir al libre comercio, según declaró este domingo Kevin Hassett, director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca.
"Anoche recibí un reporte del representante de Comercio que indicaba que más de 50 países han establecido contacto con el presidente con el propósito de iniciar conversaciones", señaló Hassett en una entrevista concedida al programa "This Week", emitido por la cadena ABC News.
El arancel global del 10%, anunciado por Trump durante la semana, comenzó a regir este sábado, en una decisión que si bien generó inestabilidad en los mercados bursátiles internacionales, se espera que solo sea algo temporal.

El pasado 2 de abril, en una fecha que fue nombrada como "el Día de la Liberación", el mandatario republicano comunicó la imposición de ese impuesto del 10% a un total de 184 países y territorios, incluida la Unión Europea. En ciertos casos, la tasa fue elevada al 20% para productos provenientes de Europa y hasta el 34% en el caso de bienes importados desde China.
En la práctica, esta política implica que, por ejemplo, si un país cobra un 10% de arancel a los productos estadounidenses, Estados Unidos impondría un 10% a las importaciones provenientes de ese país.
Trump enfatizó que los aranceles recíprocos no buscan castigar más allá de lo necesario, sino establecer un "trato justo" en el comercio internacional. Además, anticipó que podría reducir o eliminar estos aranceles si los países afectados bajan o eliminan sus propios aranceles contra Estados Unidos.

Hassett, quien formó parte del grupo de funcionarios que asesoró a Trump en el análisis de la medida, admitió que "podría observarse un alza en los precios", aunque descartó que los aranceles representen "una carga significativa" para los consumidores del país.
Además, el funcionario remarcó que los aranceles no deben considerarse como un impuesto directo, ya que están sujetos a la dinámica de la oferta y la demanda.
"Nuestro objetivo es reducir impuestos, gasto público y regulaciones, mientras establecemos una base arancelaria global que apunte a los actores más agresivos del mercado", explicó.
Más noticias: