Logo La Derecha Diario
Logo X
Pescados frescos y filetes de salmón sobre una cama de hielo en un mercado.
SOCIEDAD

Las 5 razones por las que los argentinos deberían consumir más pescado

El país tiene el privilegio de una gran extensión marítima y una industria pesquera que siempre está en crecimiento

Nadie pone en duda la afición de los argentinos por la carne vacuna, en perjuicio hacia otros alimentos, como el pescado. El bajo consumo de pescado en el país, no solo tiene razones económicas que pueden obedecer a afirmaciones instaladas como que “es caro y no rinde tanto”, sino también, a aspectos culturales que dejan al pescado muy detrás del amado asado y milanesa.

Argentina posee una costa marítima de 4 mil km de extensión. El principal puerto pesquero es Mar del Plata (49%), le siguen Puerto Madryn (16%), Rawson (12%), Puerto Deseado (8%) y Ushuaia (6%). Esta ventaja geográfica debería poder traducirse en favor de la buena accesibilidad a este producto, del que se sabe, tiene muchos beneficios  para la salud. 

Sin embargo, el consumo local de productos pesqueros es bajo, 4,8 kg/hab por año, muy por debajo del promedio mundial (20,2 kg/hab) según un informe del Ministerio de Economía sobre Pesca y Acuicultura. En tanto Perú, se ubica a la cabeza como el país de latinoamérica en el que más se consume este alimento, llegando a los 22 kg/hab por año. 

Si al dato de cuánto se consume de pescado en Argentina lo contrastamos con el consumo per cápita de la carne vacuna, que es de 38,82 kg/hab al año, se responde fácilmente hacia qué lado se inclina la preferencia de la gente. Esta brecha no podrá achicarse en tanto no se puedan analizar las razones que permitan darle al pescado el lugar que se merece. 

¿Cómo incluir el pescado en la dieta?

Ser  un país que tiene una intensa actividad pesquera  y siendo la acuicultura, (el cultivo de plantas y cría de animales en zonas continentales, costeras y marítimas) un importante potencial productivo y exportador, estas variables pueden  hacer que el consumo de pescado, ya sea fresco o en conserva, sea un hábito posible de lograr y para nada inalcanzable.

Las Guías Alimentarias para la población Argentina (GAPA) recomiendan para los adultos, el consumo de pescado al menos de dos veces por semana y  a los niños, a partir de los 9 meses, siempre y cuando se retiren todas las espinas con especial cuidado, así como también, se descarte una posible alergia a este alimento.  

Así como dentro de la economía familiar se destina parte del presupuesto a comprar carne vacuna, podría reemplazarse una de esas compras por la visita a la pescadería o a las ferias barriales que ofrecen pescado fresco. Hay un dato que puede confirmarse en los distintos comercios, y es que el martes suele ser el día en que hay mayor oferta de productos de mar y de ríos, y hasta algunos elaborados a base de esos alimentos.  

¿Qué hay que tener en cuenta para consumir pescado?

Cuando se compra pescado hay que poder verificar las características que aseguran que es un producto fresco:

-El primer rasgo es el aroma, si es desagradable, no es fresco.

-En cuanto a tonicidad: debe ser una carne firme y elástica a la vez.

-De aspecto: las escamas deben estar bien adheridas, los ojos no deben estar hundidos, el color debe ser blanco o rojo suave (nunca amarillo).

-Presentación: en las pescaderías o los puestos de feria, el producto debe estar presentado sobre escamas de hielo.

-Conservación: luego de ser comprado, el pescado debe lavarse y retirar las vísceras antes de refrigerar. También se recomienda retirar cabeza y escamas. Dentro de la heladera, el pescado puede conservarse hasta 2 días, en la parte más fría de la heladera y hasta 3 meses en el freezer  a -18° (dieciocho grados bajo cero) en recipientes herméticos o bolsas con cierre aptas para el congelador. Una vez retirado del freezer, se debe descongelar dentro de la heladera o en microondas, y nunca a temperatura ambiente para que no atraiga ni produzca bacterias. El pescado, una vez descongelado, no debe volver a congelarse. 

¿Cuáles son los pescados más recomendables según precio y beneficios?

Los pescados se clasifican según su procedencia en marinos (de mares y océanos), de agua dulce (de ríos o lagos) y migratorios (viven en mares y desovan en ríos o viceversa). 

En cuanto al contenido de grasas se pueden clasificar en magros, con un hasta 2% de grasa, semigrasos, de 2 a 8% de grasa, y grasos  que tienen más de un 8% de grasa. 

Entre los pescados grasos: 

-Arenque, caballa, bagre, salmón, surubí.

Entre los semigrasos:

-Atún, bonito, dorado, pejerrey, salmón rosado, sardina, trucha.

Entre los más magros:

-Abadejo, bacalao, corvina, merluza, mero, lenguado.

Los ácidos grasos Omega-3 del pescado, EPA y DHA, son de suma importancia para el desarrollo del cerebro y son neuroprotectores. También brindan beneficios para la salud cardiovascular al disminuir los niveles de triglicéridos y de colesterol malo (LDL) y aumentan el colesterol bueno (HDL). Los ácidos grasos del pescado omega-3 ayudan a prevenir la arritmia, un trastorno del ritmo cardíaco que puede ser mortal. 

Como beneficios neurológicos, el pescado es fuente de DHA, un tipo de ácido graso omega-3 esencial para el desarrollo y la función cerebral. El DHA ayuda a mejorar la memoria, el aprendizaje, la concentración y el estado de ánimo. También el pescado es fuente de vitamina D, que ayuda a regular el estado de ánimo y a prevenir la depresión.

¿Cuánto sale comer pescado?

Entre los productos más consumidos, la merluza siempre está en el podio, aunque otros pescados como el abadejo, pueden sustituirlo por la similitud en su carne. Lo mismo ocurre con la brótola.

El kilo de filete de Brótola cuesta $8600 en septiembre de 2024. El de merluza $7800 el de atún blanco $10800 y el de abadejo, $16000 y se calculan 600 gramos aproximadamente por persona. 

Las 5 razones por las que se debe incluir el pescado en la dieta de los argentinos son: 

  1. Gran extensión de costa marítima con intensa actividad pesquera ofrece accesibilidad para poder comprar.
  2. Potencial de cultivo y de exportación con la acuicultura que garantiza además, prácticas ecológicas.
  3. El beneficio de acceder a un producto de frescura garantizada durante todo el año.
  4. Los beneficios para la salud en los aspectos neurológicos, cardiovascular y mental.
  5. Rango de precios amplio que permite obtener mucha variedad al incluir productos en conserva, además de los frescos.

Algunas formas de incluir el pescado en la dieta pueden ser en albóndigas, en rebozados, en guisos, en escabeches, en rellenos o empanadas. El pescado puede ser apenas más costoso que la carne vacuna, aunque los beneficios para la salud son muchos como para poder darle un lugar de mayor presencia en la heladera y tener platos más variados. 

➡️ Argentina ➡️ Sociedad

Más noticias: