
Privatización del Comahue: Caputo espera sumar 500 millones de USD por las represas
La licitación incluirá cuatro centrales hidroeléctricas en Neuquén y Río Negro.
El ministro de Economía, Luis Caputo, confirmó que el Gobierno nacional proyecta ingresar entre USD 400 y USD 500 millones con la privatización de las represas del Comahue. La licitación se publicará en los próximos días y buscará transferir el paquete accionario a nuevos operadores privados.
Las centrales involucradas son Alicurá, El Chocón-Arroyito, Cerros Colorados y Piedra del Águila, ubicadas en los ríos Limay y Neuquén. Actualmente están en manos de empresas como AES, Enel, Aconcagua y Central Puerto. La concesión original fue otorgada en 1993 y vence en agosto próximo.
Aportes para reservas del BCRA
La privatización se enmarca dentro del plan del Gobierno para generar ingresos en divisas que permitan reforzar las reservas del Banco Central. “Es parte del plan más amplio de generación de dólares genuinos”, explicó Caputo en una entrevista reciente.

Desde el Ministerio de Economía buscan replicar un esquema similar al de los años noventa: concesión por 30 años, control estatal y gestión privada. El objetivo es concluir el proceso antes del 11 de agosto, fecha límite de la prórroga transitoria actual.
Acuerdo con las provincias: canon por uso del agua
La iniciativa generó tensiones con los gobiernos de Neuquén y Río Negro, que inicialmente denunciaron falta de consulta. Ambas provincias reclamaban una mayor participación en el proceso, ya que las represas están ubicadas dentro de sus límites territoriales.
Según informó Econojournal, la negociación política logró destrabar el conflicto. Se acordó que las provincias recibirán un canon del 1% cada una por el uso del agua, uno de los principales reclamos locales.
“Es importante que el recurso hídrico no quede solo en manos del Estado nacional o de privados”, argumentaron los gobernadores, quienes también pidieron incluir criterios ambientales y mecanismos de compensación.
Nueva etapa: sostenibilidad y control ambiental
La Secretaría de Energía trabaja en los pliegos licitatorios que definirán el perfil técnico, económico y ambiental de las nuevas concesiones. El esquema incluirá criterios de sostenibilidad y control más estricto sobre los niveles de embalse y el impacto ambiental de la actividad.

Además, el proceso implicará una coordinación técnica entre los actuales y futuros operadores para garantizar la continuidad del suministro eléctrico.
Las cuatro represas representan entre el 10% y 15% de la matriz energética nacional, con una potencia instalada combinada de 4.170 megawatts (MW).
Más represas en la mira
A partir de este año comenzarán a vencer otras 15 concesiones hidroeléctricas, de menor caudal pero bajo el mismo modelo legal que las del Comahue.
El Gobierno prevé aplicar un esquema similar para esas unidades, con una lógica de transición ordenada y continuidad operativa.
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