La Derecha Diario Biden aprueba un nuevo envío armamentístico a Ucrania
A semanas de la asunción de Donald Trump, el demócrata vuelve a enviar un gran paquete de ayuda al régimen de Zelensky
La administración del presidente Joe Biden está preparando un paquete de armas de USD 725 millones para Ucrania, según confirmaron dos altos funcionarios estadounidenses.
El objetivo es fortalecer al gobierno ucraniano frente a la operación rusa antes de que Biden deje el cargo en enero, momento en que el presidente electo Donald Trump asumirá la presidencia.
El paquete incluirá una variedad de armas antitanque provenientes de las reservas estadounidenses, como minas terrestres, drones, misiles Stinger y municiones para los sistemas de artillería de alta movilidad (HIMARS).
También se espera que contenga municiones en racimo, que suelen ser parte de los cohetes del sistema de lanzamiento múltiple GMLRS utilizados por los HIMARS. Estas municiones, aunque controversiales, han sido solicitadas por Ucrania desde la invasión rusa en 2022.
El uso de minas terrestres por parte de Estados Unidos es significativo, ya que el país no ha exportado este tipo de armamento en décadas debido a su potencial riesgo para los civiles.
Sin embargo, las minas incluidas en este paquete serán del tipo "no persistente", es decir, diseñadas para desactivarse después de un tiempo limitado, reduciendo el peligro para la población civil. Estados Unidos espera que Ucrania use estas minas únicamente en su propio territorio y fuera de áreas habitadas por civiles.
El anuncio formal del paquete podría llegar al Congreso el lunes, aunque el tamaño y los detalles del envío aún están sujetos a cambios antes de la firma de Biden. Este paquete representa un aumento significativo en el uso de la Autoridad de Reducción Presidencial (PDA, por sus siglas en inglés), que permite al gobierno tomar armamento de las reservas existentes en caso de emergencia.
Anteriormente, los paquetes de PDA rondaban entre USD 125 y USD 250 millones, pero Biden aún dispone de entre USD 4,000 y USD 5,000 millones autorizados por el Congreso para este propósito.
El envío de estas armas se da en un momento particular, ya que las fuerzas rusas están logrando avances significativos en Ucrania, ocupando áreas comparables en tamaño a la mitad de Londres en el último mes, según analistas. Este contexto aumenta la presión por parte de los demócratas para reforzar las defensas ucranianas rápidamente.
Por otro lado, Donald Trump, quien hizo de la finalización del conflicto en Ucrania una de sus principales promesas de campaña, ha designado al general retirado Keith Kellogg como enviado especial para el conflicto.
Kellogg ha presentado a Trump un plan para poner fin a la guerra, aunque los detalles de dicho plan no han sido divulgados. El enfoque de Trump contrasta con el actual respaldo militar de Biden, señalando un posible cambio en la política estadounidense hacia Ucrania cuando asuma el cargo el 20 de enero.
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