Comenzó el juicio a Diddy Combs por tráfico sexual inició con bromas del juez

El juicio federal contra Sean "Diddy" Combs  por crimen organizado y tráfico sexual comenzó con un tono inesperadamente ligero. El juez Arun Subramanian,  encargado del proceso,  rompió el hielo con bromas sobre los múltiples apodos del acusado y comparó la longitud del cuestionario del jurado con la famosa trilogía de "El Señor de los Anillos".

En la sala del tribunal, Subramaniancomentó el tamaño de la lista de posibles jurados, anticipando un proceso de selección prolongado y complejo. La fiscalía y la defensa enfrentaron numerosos desafíos en la conformación del jurado, tarea que, según se esperaba, tomaría varios días.

Un inicio inusual para un juicio federal de alto perfil

Diddy se presentó en el juzgado federal Daniel Patrick Moynihan, en el Bajo Manhattan, vestido con ropa formal, lentes para leer, un suéter y barba canosa bien cuidada.  El juez había autorizado previamente que compareciera con vestimenta civil, permitiéndole elegir entre una lista limitada de prendas, en lugar del uniforme carcelario.

Cinco cargos y una defensa mediática

Combs enfrentó cinco cargos en total. Originalmente se le imputaron tres:  tráfico sexual mediante fuerza, fraude o coerción; transporte para ejercer la prostitución; y conspiración para cometer crimen organizado. En abril de 2025, se sumaron dos nuevos cargos:  otro por tráfico sexual y uno adicional por transporte con fines de prostitución.

El juez recordó que el artista, también conocido legalmente como "Love" desde 2018, se declaró inocente y mantiene la presunción de inocencia.

Durante la primera audiencia,  Subramanian también abordó cuestiones de privacidad que podrían surgir durante los testimonios, anticipando que estos temas se discutirían de forma paralela para proteger a los implicados. Además, proyectó que el juicio se extendería por unas ocho semanas.

Diddy se presentó respaldado por un equipo de ocho abogados, cuya composición final se había confirmado la semana anterior.

En otro momento llamativo,  el juez mencionó el caso de Ghislaine Maxwell, la expareja del pedófilo convicto Jeffrey Epstein, aludiendo a similitudes con las acusaciones que enfrenta Diddy. Maxwell cumple una condena de 20 años en Florida, condenada por crímenes sexuales vinculados a una red de trata.