Investigadores hallan un impactante tesoro romano de más de 1900 años en el Mar Muerto

Un hallazgo arqueológico de relevancia internacional ha tenido lugar en una cueva aislada cercana al Mar Muerto, en la reserva natural de Ein Guedi.

Allí,  un equipo de arqueólogos israelíes ha descubierto un conjunto de espadas romanas en un estado de conservación excepcional, que datan de hace aproximadamente 1.900 años.

Contexto histórico del  descubrimiento

El desierto de Judea, donde se encontró este tesoro, es reconocido por sus condiciones climáticas extremas, que favorecen la preservación de artefactos antiguos.

Además, la región fue escenario de importantes acontecimientos históricos, como la revuelta de Bar Kokhba entre los años 132 y 136 d.C., una insurrección judía contra el dominio del Imperio romano.

Detalles del hallazgo

El equipo de la Autoridad de Antigüedades de Israel (AAI) encontró cuatro espadas romanas ocultas en una grieta profunda y de difícil acceso. Tres de ellas tienen entre 60 y 65 centímetros de longitud, mientras que una cuarta es más pequeña, de 45 centímetros. Se cree que pertenecen al tipo spatha, comúnmente utilizado por las tropas romanas de la época.

Los investigadores sugieren que estas armas podrían haber sido sustraídas por rebeldes judíos y ocultadas con la intención de ser reutilizadas en futuros enfrentamientos. Esta hipótesis está respaldada por fragmentos de cuero, metal y vainas de madera hallados junto a las espadas, además de detalles de sus empuñaduras, algunas revestidas en cuero.

Características destacadas

• Material: Hojas de hierro típicas del armamento militar romano.
• Estado de conservación: Tres espadas permanecían dentro de sus vainas de madera originales.
• Diseño: Una de las espadas tiene un pomo metálico en forma de anillo, característico del siglo II d.C.
• Clima: Las condiciones áridas del desierto contribuyeron significativamente a su preservación.

Importancia del descubrimiento

Este hallazgo inaugura una nueva etapa de investigación arqueológica. Según Eitan Klein, director del Proyecto de Prospección del Desierto de Judea, se busca determinar el origen de las espadas, incluyendo su fabricación, propietaria original y contexto histórico.

Las armas están siendo sometidas a un análisis exhaustivo en los laboratorios de la AAI mediante pruebas como tomografía computarizada y radiografía.  Los resultados podrían proporcionar información valiosa sobre la producción de armamento en el Imperio romano oriental, una región menos estudiada en comparación con Europa occidental.

Contexto histórico y posibles interpretaciones

El período en que las espadas fueron ocultadas coincide con una época de tensiones tanto internas como externas en el Imperio romano. Algunas posibles explicaciones para su ocultamiento incluyen:

• Revuelta de Bar Kokhba: Rebeldes judíos que escondieron las armas para usarlas en enfrentamientos posteriores.
• Conflictos internos del Imperio: Luchas de poder entre facciones rivales del ejército romano.
• Uso por bandoleros locales: Grupos que aprovecharon el desorden para hacerse con armamento.

Además de las espadas, en la cueva se encontraron monedas de bronce del período de la revuelta de Bar Kokhba y artefactos aún más antiguos, como herramientas del periodo calcolítico (4500-3500 a.C.).

Conservación y protección del patrimonio

Eli Eskosido, director de la AAI, destacó que  el desierto de Judea actúa como una cápsula del tiempo, preservando artefactos únicos de la historia humana. Sin embargo, también subrayó la necesidad urgente de proteger estos hallazgos de los saqueos que amenazan constantemente el patrimonio arqueológico de la región.

Este descubrimiento no solo ilumina el pasado, sino que también refuerza el compromiso con la preservación y el estudio de la historia. En los próximos años, los investigadores esperan desentrañar más detalles sobre la vida cotidiana, las estrategias militares y las interacciones culturales del Imperio romano de Oriente.