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Un hombre con barba y sombrero sostiene un vaso mientras viste una camiseta roja con rayas grises en las mangas, con un fondo de árboles desenfocado.
POLÍTICA

Un policía retirado fue asesinado mientras liquidaba a un ladrón que amenazó a su hija

El delincuente, que tenía una condena de 12 años por homicidio, disparó casi al mismo tiempo que el heroico ex policía.

El policía retirado Héctor Enrique Pelayes (60) estaba saliendo de la ducha en su casa de Los Corralitos, en Guaymallén, cuando se encontró con dos ladrones encapuchados que amenazaban a su hija con un revólver. Sin dudarlo, fue por su arma y le disparó en el pecho a uno de los intrusos.

El delincuente herido, Roberto Pereyra Cruz (36), quien había sido condenado a 12 años por un homicidio durante un robo y había obtenido la libertad condicional, también abrió fuego, alcanzando al heroico ex policía con una bala en el corazón. Ambos cayeron desplomados en una habitación de la casa.

El trágico incidente ocurrió cerca de las 21:30 del domingo en una vivienda ubicada en el carril Godoy Cruz al 10560, en el Gran Mendoza. La zona es semi rural, y muchas familias han decidido armarse debido a la creciente inseguridad.

En la casa estaban los hijos de Pelayes (una chica y un varón), su nieto de 9 años y un amigo de este último, de 10 años. Los ladrones irrumpieron en la propiedad tras saltar una medianera en el patio. "Al ingresar, redujeron con intenciones de robo a los miembros de la familia", señala el informe policial.

Pelayes, quien estaba en el baño al momento del asalto, salió, tomó su pistola 9 milímetros y enfrentó a los delincuentes. Se produjo un intercambio de disparos, ya que uno de los asaltantes también disparó al ver al dueño de casa armado. Tanto Pelayes como el ladrón resultaron gravemente heridos, mientras que el cómplice logró escapar.

Cuando llegó la Policía y una ambulancia del Servicio de Emergencias Coordinado, confirmaron que tanto el policía retirado como el delincuente habían fallecido debido a las heridas de bala.

Una vecina relató a la radio LV10 que el nieto de Pelayes y su amigo corrieron pidiendo ayuda. "Entraron a mi casa, me dijeron que habían disparado a su abuelo, estaban aterrorizados. Me contaron que durante el asalto se escondieron debajo de una cama", contó.

La Policía de Investigaciones recogió pruebas hasta la medianoche en la vivienda, donde los cuerpos de Pelayes y el delincuente quedaron en la misma habitación, muy cerca uno del otro.

El caso está siendo investigado por la fiscal de Homicidios de Mendoza, Claudia Ríos, quien solicitó la identificación del delincuente a través del registro de huellas genéticas.

Los antecedentes del asesino de Pelayes

El asesino fue identificado como Roberto Pereyra Cruz, de 36 años, residente del barrio 25 de Mayo en Rodeo del Medio, Maipú. Había estado preso desde febrero de 2016, cuando fue condenado a 12 años y 6 meses de prisión por homicidio. En marzo de 2023, durante el gobierno kirchnerista, había conseguido la libertad condicional, otorgada por el juez de Ejecución Penal Sebastián Sarmiento, después de cumplir tan solo cinco años de su condena.

Héctor Pelayes, viudo, había trabajado la mayor parte de su carrera en la División Motorizada y se retiró en 2010, después de 26 años de servicio. En los últimos años, comenzó a militar en el Partido de los Jubilados, donde ocupaba el cargo de presidente y había apoyado en la última campaña a gobernador al dirigente del Pro, Omar De Marchi, aliado de La Libertad Avanza.

Sus compañeros del Partido de los Jubilados le dedicaron un emotivo mensaje en las redes sociales: "Nuestro compañero Héctor Pelayes murió defendiendo la vida de sus seres queridos. Gracias por tu amistad y entrega total para la comunidad policial y civil de Mendoza".

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