
El desabasto de agua en el Estado de México persiste y el gobierno no hace nada
El Estado de México enfrenta una crisis hídrica sin precedentes. las presas están al mínimo dejando municipios sin agua
El agua se acabó y el gobierno solo da excusas
El Estado de México sigue sumido en una crisis de agua sin precedentes, con presas al 30% de su capacidad y cortes constantes en municipios clave.
A pesar de las advertencias de expertos, el gobierno no ha tomado medidas efectivas para garantizar el suministro, dejando a millones de habitantes sin acceso a agua potable.

En lugar de invertir en infraestructura hídrica, las autoridades han preferido destinar recursos a proyectos políticos y programas clientelares.
La crisis hídrica golpeó a millones de familias
Los habitantes de municipios como Ecatepec, Nezahualcóyotl, Naucalpan y Tlalnepantla han denunciado cortes de agua constantes y la falta de suministro por parte del gobierno estatal.

Las empresas distribuidoras de agua en pipas han visto un incremento en la demanda, pero el costo del servicio se ha disparado, afectando aún más a las familias de escasos recursos.
Mientras tanto, el sector agrícola ha registrado pérdidas millonarias debido a la falta de agua para riego, poniendo en riesgo la producción de alimentos en la entidad.
Un gobierno ausente mientras la crisis empeora
A pesar de la gravedad de la situación, las autoridades estatales han ofrecido respuestas vagas y soluciones insuficientes.
En lugar de invertir en la modernización del sistema de distribución, el gobierno se ha limitado a hacer llamados a la "conciencia ciudadana", culpando a la población por el mal uso del agua.
La tala indiscriminada, la falta de mantenimiento en los sistemas de captación y la sobreexplotación de los mantos acuíferos han sido ignoradas por las autoridades.
Evidentemente siguen sin asumir su responsabilidad en la crisis.
El Estado de México se quedó sin agua y sin soluciones
Mientras la crisis del agua sigue empeorando, el gobierno se mantiene en la inacción, permitiendo que el problema se vuelva irreversible.
Los habitantes del Estado de México se enfrentan a una escasez sin precedentes, mientras la clase política sigue desviando recursos a proyectos sin impacto real en la población.
El agua se ha convertido en un lujo para millones de mexiquenses.
el gobierno sigue demostrando que es incapaz de resolver una de las crisis más graves que enfrenta el país en estos ultimos años.
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